El director Nacional de Inteligencia, James Clapper, jefe de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), Michael Rogers, y el subsecretario de Defensa para Inteligencia, Marcel Lettre, acusaron este jueves a Rusia de realizar ataques cibernéticos contra Estados Unidos (EE.UU) durante las elecciones presidenciales de 2016.
Durante una declaración conjunta ante el Comité de Fuerzas Armadas del Senado norteamericano, los encargados de los organismo de inteligencia en el que aseguraron que el Gobierno ruso es una «gran amenaza para EE.UU y sus intereses militares, diplomáticos y comerciales, así como a la infraestructura crítica y las redes de recursos claves».
En este sentido, indicaron que la autorización para incidir en las elecciones de Estados Unidos solo pudieron ser dadas por «los más altos responsables de Rusia» en alusión al presidente Vladimir Putin.
La declaración fue presentada al Comité dirigido por el senador republicano John McCain, uno de los más fuertes detractores del presidente electo Donald Trump y sus declaraciones a favor del líder del Kremlin.
McCain convocó a los líderes de la inteligencia estadounidense para verificar las acusaciones del presidente Barack Obama contra Rusia y las posteriores declaraciones de Trump a favor de Putin.
«Todo estadounidense debería alarmarse por los ataques de Rusia a nuestra nación», aseguró el senador durante su participación en la sesión, después que los encargados de inteligencia ofrecieran sus declaraciones.