El papa Francisco pidió a los católicos que difundan su fe con «suavidad y firmeza, sin arrogancia o imposición» en vista de que la misión de esta nunca será el proselitismo.
«La auténtica misión no es nunca el proselitismo, sino la atracción a Cristo, a partir de la fuerte unión con él en la oración, en la adoración y en la caridad concreta», puntualizó el sumo pontífice desde la ventana del Palacio Apostólico que da a la Plaza de San Pedro, antes del rezo del Ángelus.
Por otra parte, lamentó las muertes ocurridas en Italia por las las bajas temperaturas registradas. «Pienso en todas las personas que viven en la calle, en el frío» sumó.
Instó a que oren por ellos y le pidan al Señor que caliente el corazón de cada uno, para brindarles ayuda oportuna. Esto luego de haber bautizado a 28 niños en la Capilla Sixtina.