El juicio del Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil contra el presidente interino Michel Temer, fue retomado este miércoles con un intenso debate entre los magistrados sobre si deberían o no aceptar las nuevas pruebas de corrupción contra el primer mandatario.
El presidente del TSE, Gilmar Mendes, calificó como «falaces» los argumentos ofrecidos por el relator del caso, Herman Benjamin, por querer incluir en la causa testimonios posteriores a los del período de instrucción.
Estas nuevas pruebas muestran las donaciones presuntamente ilegales, que tienen relación a los acuerdos de la físcalía con 77 directivos de la empresa Odebrecht.
Según diversos medios brasileños, el debate transcurrió de manera intensa, resaltando las diferencias entre los jueces dispuestos a aceptar las nuevas pruebas y los que se oponen a ellas.
Es necesario resaltar que si la corte falla a favor de la denuncia de que ambos, la presidenta destituida Rousseff y Temer recibieron contribuciones ilegales durante su campaña, esto significaría la destitución inmediata de Temer; la segunda en el país, en menos de un año