La detención del expresidente panameño, Ricardo Martinelli, en su residencia en Estados Unidos no garantiza su extradición a Panamá, donde podría ser juzgado por delitos de corrupción y espionaje.
Martinelli fue detenido ayer (martes) en su domicilio, ubicado en Coral Gables, Miami, en medio de un «protocolo de allanamiento», según informó el diario panameño La Estrella.
El próximo martes será presentado ante un fiscal del estado de Florida, quien decidirá las condiciones de su extradición en caso de aprobarse.
Por momento no está garantizada la extradición del exmandatario centroamericano, pues en septiembre del año anterior la Corte Suprema de Justicia (CSJ) había solicitado esa petición, pero los abogados defensores interpusieron argumentos legales para impedirlo, situación que podría repetirse al finalizar su detención.
La justicia estadounidense tiene en sus manos tomar en cuenta las acusaciones realizadas por Panamá a Martinelli, que implican delitos de corrupción y espionaje a ciudadanos de oposición durante su gobierno entre 2009 y 2014.
En 2014, Martinelli solicitó ante la Organización de Estados Americanos (OEA) una reunión para consultar la situación en Venezuela. Como respuesta, el presidente Nicolás Maduro rompió relaciones con Panamá.
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