Muy alto fue el costo que pagaron los venezolanos quienes, por ilegal, rechazan la asamblea nacional constituyente impuesta por Nicolás Maduro. El Foro Penal Venezolano contabilizó un total de 17 asesinatos, por causa de la desatada represión ordenada por el régimen durante las protestas que se desarrollaron en el país el 29 y 30 de julio, contra el fraude constituyente.
El fraude constituyente perpetrado por el Consejo Nacional Electoral (CNE) no se presentó el domingo 30 de julio. Ese día solo lo refrendó.
En realidad, el fraude comenzó el miércoles 3 de mayo, cuando las cuatro rectoras principales (excluimos a Luis Emilio Rondón) recibieron de manos de Nicolás Maduro la propuesta formal para la realización de una asamblea nacional constituyente en su origen viciada, ilegal, con unas bases comiciales dictadas por Maduro y ajustadas por la presidente del ente comicial, Tibisay Lucena, para dejar de lado al pueblo venezolano, al que le correspondía pronunciarse en referendo si aprobaba o no liquidar la constitución vigente. Porque es eso lo que se persigue.
En ese ínterin, la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) realizó una consulta popular el 16 de julio. La primera de tres preguntas decía: ¿Rechaza y desconoce la realización de una constituyente propuesta por Nicolás Maduro sin la aprobación previa de la mayoría del pueblo de Venezuela? La respuesta fue contundente en una jornada histórica, pues votaron 7.535.259 venezolanos, de los cuales el 98,4% dijeron NO a la constituyente.
La altísima participación de la gente resultó algo sin precedentes en América Latina y hasta en el mundo, pues se logró en medio de un proceso organizado en solo 15 días, sin recursos, con muy pocos centros de votación, sin una campaña electoral a través de los medios de comunicación y frente a la represión y las arremetidas criminales de los llamados colectivos de civiles armados, amparados por el régimen de Maduro. Y si vamos a los números, solo basta recordar que en los comicios de diciembre de 2015 para la Asamblea Nacional, la oposición consiguió 7.726.066 votos, es decir, apenas 190.807 más que en la consulta popular del 16 de julio.
Centros de votación vacíos
En cambio, el proceso de votación que se desarrolló en Venezuela el domingo 30 de julio, para elegir a las 545 personas que integrarán la asamblea nacional constituyente convocada por Nicolás Maduro, sin consultar al pueblo venezolano, se caracterizó por una exigua participación de electores.
En el este de Caracas, por ejemplo, la ausencia de votantes se acercó al 100%, pues se pudo constatar que los sufragantes tampoco habían acudido a los centros especiales que fueron habilitados por el CNE.
Pero los ciudadanos tampoco lo hicieron en zonas antes consideradas como territorios del chavismo, hoy madurismo, como Catia, Caricuao, el 23 de Enero, La Candelaria, San Bernardino, La Vega, El Valle y hasta en Miraflores, a pocos metros del palacio de gobierno.
En lo que respecta al interior del país, las redes sociales, en especial Twitter, mostraban centros de votación desolados, como reflejo de la poca o ninguna participación ciudadana.
Se observaron imágenes que así lo mostraban en los estados Amazonas, Anzoátegui, Apure, Aragua, Bolívar, Carabobo, Cojedes, Falcón, Lara, Miranda, Monagas, Nueva Esparta, Portuguesa, Táchira, Trujillo, Vargas y Zulia.
Frente a esta situación, los medios audiovisuales en manos del Estado, en especial Venezolana de Televisión, hacían esfuerzos por presentar una realidad distinta, con tomas más cerradas en los centros donde votaron los representantes del alto gobierno.
Las denuncias sobre el fraude que preparaba el CNE y el Ejecutivo comenzaron a surgir. Las colas que más mostraba la TV oficialista eran del Poliedro de Caracas, donde la gente acudió más a buscar comida que a votar.
También se reportó que el proceso de votación ya se había iniciado el sábado sobre todo en sectores populares. Zeta pudo corroborar, al menos, que así sucedió en el barrio Unión de Barquisimeto, en la carrera 3 con 5 y 6. Sin embargo, se dijo que así era en otros centros de esa entidad y del país.
El «papelón de la Patria»
Cuando las cosas comienzan mal, siguen mal y terminan peor. Al desaguisado presidencial y del CNE, se sumó el mismo acto de votación de Maduro y la denuncia realizada el miércoles por Smartmatic, la operadora de las máquinas de votación, que dejaron al desnudo el fraude cometido.
Pero vamos a referirnos a lo segundo, el voto de Maduro.
Fue un hecho que se tornó viral en la mañana del domingo y que demostró las graves fallas que presentaba la votación a través del llamado carnet de la patria del gobierno.
Maduro fue a votar acompañado de Cilia Flores en un centro de votación en el oeste de Caracas, pocos minutos después de las 6:00 de la mañana. No faltó, por supuesto, la transmisión en vivo del canal estatal VTV.
Maduro, según anunciaban con bombos y platillos desde el sector oficialista, sería el primero en votar ese domingo en las elecciones para la constituyente; sin embargo todo se le enredó, al tener problemas para encontrar su registro en el sistema. Después de que votó, cuando mostró, al sacárselo de su bolsillo, su carnet de la patria para verificar que votó por la ANC, le apareció un mensaje que decía: «La persona no existe o el carnet fue anulado». El «tremendo papelón de la Patria» quedó plasmado en videos.
Saldo de sangre
La represión de los cuerpos de seguridad del régimen fue protagonista el fin de semana contra los que manifestaron en las calles su rechazo al acto de votación para la asamblea nacional constituyente.
La MUD había convocado para ese domingo 30 de julio, a una concentración a partir de las 10:00 de la mañana en la autopista Francisco Fajardo y una hora más tarde, los manifestantes fueron reprimidos fuertemente en Altamira, en el distribuidor y la avenida principal de Los Ruices y también en Caurimare, en las adyacencias de la Clínica Metropolitana. Ese centro de salud fue afectado por los gases lacrimógenos que dispararon los uniformados, al extremo que los médicos tuvieron que colocar en lo más alto la bandera de la Cruz Roja.
Entretanto, en Altamira, se registró la explosión de un artefacto, que incendió siete motos en la plaza Francia. En el hecho varios civiles y funcionarios resultaron heridos.
La explosión se presentó en el momento en que iba pasando un contingente de la Policía Nacional Bolivariana (PNB). Se quemaron dos motos de los efectivos policiales y el resto las arrastró la PNB a las llamas.
Mientras, en las residencias Paraíso Plaza de El Paraíso en Caracas, una tanqueta que tumbó con violencia su portón se incendió por el impacto.
En paralelo, la MUD llamó a un trancazo en calles y avenidas del interior del país, donde la represión fue todavía más brutal, registrándose un saldo de 16 fallecidos, como lo informó inicialmente el Foro Penal Venezolano (FPV). Luego, la cantidad se elevó a 17 el lunes, al fallecer otro venezolano que fue herido el domingo.
De las víctimas, cinco fallecieron el día sábado 29 de julio mientras que 11 fueron asesinadas el domingo 30. Entre los fallecidos se incluye un menor de edad y un funcionario de la Guardia Nacional.
En el estado Táchira fueron cinco los asesinados: Wilmer Smith de 19 años, quien durante un enfrentamiento con la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) el sábado recibió un impacto de bala; Luis Ortiz de 17 años, perdió la vida al ser impactado en el tórax, en el municipio Cárdenas. Al igual que Ortiz, Albert Rosales de 58 años recibió impactos de balas provenientes de grupos civiles armados.
El cuarto caso fue el de Ronald Ramírez, funcionario de la GNB, quien falleció luego de recibir un disparo en el rostro, y el quinto el de Adrián Rodríguez de 13 años.
Del estado Mérida se contaron Ángelo Méndez de 28 años y Eduardo Olave de 39, quienes recibieron heridas por arma de fuego.
Entretanto, en el sector merideño de Chiguará perdieron la vida Marcel Pereira de 38 años e Iraldo Gutiérrez, ambos por impactos por arma de fuego.
En el estado Lara murió Luis Zambrano, de 43 años, quien recibió el domingo un disparo en la cabeza, mientras protestaba en la urbanización El Obelisco. Y en Aguada Grande, municipio Urdaneta, perdió la vida Juan Gómez de 32 años.
Por otro lado, en la madrugada de ese mismo día, fue asesinado el secretario juvenil de Acción Democrática en el estado Sucre, Ricardo Campos, quien recibió un impacto de bala mientras se bajaba de su vehículo. Se informó que no estaba participando de la protesta que había en las adyacencias. Por el hecho, están imputados dos policías de Cumaná, José Castillejo y David Chacón.
El asesinado 17 durante las protestas de la constituyente fue Antoni Labrador, quien murió el pasado lunes tras ser herido de bala el domingo en el municipio Pedro María Ureña.
Labrador tenía 28 años. Cuando fue herido durante una manifestación lo trasladaron a un centro de salud en la ciudad de Cúcuta, Colombia, donde había como atenderlo, junto a otras personas que también recibieron impactos de proyectil.
Twitter: @Alconde