Ana Elisa Osorio, exministra de Ambiente durante la gestión de Hugo Chávez, en entrevista exclusiva a El Nuevo País y Zeta manifestó sentirse preocupada por las acciones que ha tomado el mandatario Nicolás Maduro, pues a su juicio, limitan “las opciones que nos distinguían como una democracia participativa y protagónica”.
Osorio, es una de las tantas figuras del “chavismo crítico”, que en la actualidad hacen oposición a la administración del sucesor de Chávez, a quien aseguran continúan mostrándole fidelidad, pese a ello.
La exministra, aseguró que en el 2013 votó por Maduro por ser “chavista y porque de alguna manera el presidente Chávez nos orientó a que él era la opción que lo supliera. Sin embargo, hoy en día uno dice lo que está pasando”.
Osorio lamenta el nivel de escasez de alimentos en Venezuela. Asegura desconocer qué sucede con la producción nacional. “Es como si no hay producción nacional, lo que se consigue son productos importados”, agrega.
Con respecto a la Constituyente, dice que la mayor responsabilidad no solo es del Estado sino también de la oposición por no participar. Sin embargo, sostienen que “no debieron realizar una Constituyente monopartidista”.
“Yo no estoy de acuerdo con que se modifique la Constitución sin que haya una discusión abierta con el pueblo venezolano, porque así como no se hizo un referéndum para saber si nosotros queríamos una Constitución o no, no sabemos si realizarán uno para las posibles reformas que realizarán”, puntualizó.
Considera, que las constituciones no deben cambiarse cada 15 ó 20 años, y enfatiza de esta manera que no entiende “cuál es la verdadera razón” para convocar una Asamblea Nacional Constituyente. “Me preocupa que tengan otras pretensiones que nadie tiene claras, es decir, qué hay detrás o qué se puede ver en una segunda lectura, formando una Constituyente, con miembros constituidos, porque todos son ministros o parte del Gobierno, lo cual no tiene sentido”, resalta.
El denominado “Legado de Chávez”
Osorio, quien aún se considera chavista, opina que se ha venido deteriorando lo que se había logrado durante la gestión del fallecido presidente Hugo Chávez. “Uno ve gente hurgando en la basura, las personas que solo poseen un salario mínimo, no puede comer las tres comidas –desayuno, almuerzo y cena- del día”.
Asegura, que es grave que no se presenten las estadísticas para poder evaluar cuál es la situación en los hogares, sabiendo que existe un desabastecimiento enorme de medicinas. “Incluso yo estoy tomando mi antihipertensivo porque me lo enviaron del exterior pero no todos tienen esa posibilidad”.
Asimismo, dijo que tiene información de que el Hospital Vargas está en una situación crítica por la falta de medicamentos. “La gente no puede comprarlos o simplemente no se consiguen”, añadió, al indicar que “es una situación muy seria y no siento que la asuman como una emergencia”.
Chávez vs. Maduro
Al preguntarle sobre las diferencias de Chávez y Maduro, Osorio exclamó que “Chávez fue Chávez”, y que a pesar de que fue militar y que la mayoría le consideraba autoritario, “era una persona con la que se podía hablar”.
“Yo trabajé cinco años como ministra durante el gobierno de Chávez, fui diputada al Parlamento Latinoamericano porque él me propuso”, apuntó, tras asegurar que la situación en ese entonces era diferente.
“Los hospitales fueron remodelados, no había problemas de escasez de alimentos, solo durante el período corto del paro petrolero que se puede decir que fue provocado”.
Osorio, indicó que durante los 13 años de gobierno de Chávez “mejoraron la calidad de vida de los venezolanos, pero ahora no sabemos cómo está esa situación porque no hay estadísticas, no divulgan lo que hacen, no se puede hacer seguimiento para saber si ha mejorado, si se ha mantenido o si hay un retroceso”.
Considera que la situación actual podría mejorar si se lleva a cabo un “diálogo sincero, en el cual participen todos los sectores, para buscar salidas y hacer prioridades”. Puntualizó que las negociaciones que realicen no deben ser “ocultas sino transparentes”.
Explica que Maduro debe convocar al empresariado para buscar resolver las situaciones prioritarias como la alimentación “que no tiene que ver con repartir el CLAP, sino que se deben producir alimentos”.
Durante el año 2017 han sido varios los chavistas que se convirtieron en opositores de la gestión de Nicolás Maduro: entre ellos la fiscal general, Luisa Ortega Díaz; el diputado, Germán Ferrer; la exdefensora del pueblo, Gabriela Ramírez; el diputado Eustoquio Contreras; el politólogo, Nicmer Evans; son algunos de los críticos más resaltantes.
El diputado oficialista, Eustoquio Contreras, considera que en el país no se han buscado soluciones. “Venezuela tiene una profunda crisis, pero cuidado compañeros del poder del pasado y del presente. Esta crisis es porque la democracia del 58 al 98 y nosotros en 17 años no solo no pudimos llenar las expectativas, sino que se han agravado muchos de los problemas”.
Mientras que el politólogo, Nicmer Evans afirma que «la única salida constitucional eficiente para resolver crisis política del país es la renuncia de Maduro y su gobierno de manera negociada».
La gestión de Nicolás Maduro se ha visto cubierta por fuertes críticas, que además de la oposición, vienen inesperadamente de los chavistas que se siente defraudados y creen que el “Legado de Chávez” ha quedado sepultado.