La dirigente de Vente Venezuela, María Corina Machado ha sido una de las principales críticas a las actuaciones de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD). Una alianza de partidos que, a la luz de los últimos acontecimientos, pareciera estar en sus últimas horas y que, además, ha abierto una zanja entre los partidos que la componen.
-Su posición sobre lo que ha ocurrido en los últimos días con la MUD
MCM: Lo primero es que yo no voy a caer en descalificaciones. Nunca lo he hecho. Cada quien defiende su visión, su política, sus propuestas y es ahí donde quiero concentrarme.
Los hechos de los últimos días han demostrado que esto es una narcodictadura que esta dispuesta a imponer a todos a la sumisión a través de una Constituyente cubana fraudulenta e ilegitima.
Yo califico el 15 de octubre, no como unas elecciones, sino como un ejercicio militar. Una ocupación total del territorio subordinado a este parapeto supraconstitucional.
Una Constituyente que decidió quiénes eran los candidatos, quiénes eran los electores y que ahora decide que quién manda es ella. Es toda una ficción. Yo sí creo que es el momento de hacer una profunda reflexión y retomar lo que fue el mandato del 16 de julio con una ruta muy clara que es el desconocimiento de toda la tiranía.
Además, apoyar tres fuerzas: el descontento, la urgencia de la gente. Un 80 % que esta harto y desesperado; la fuerza institucional que tiene la Asamblea Nacional y el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), legítimo designado por esta Asamblea y, aunque esta actuando desde la OEA, esta actuando y, desde luego, la presión internacional que pasó en estos meses, de la retórica a una acción real y las acciones siguen.
Obviamente todo esto requiere de una conducción política que genere confianza dentro y fuera del país y con una misma dirección que no es otra que hay que sacar a la dictadura y a sus mafias del poder. No podemos desviarnos de esa ruta porque lo contrario es darle tiempo, oxigeno, espacio y plata a la tiranía.
-Coincide con factores de la oposición en que para luchar contra el gobierno y lograr lo que quieren, no pueden hacerlo solos
MCM: Yo creo que es importantísimo construir una unión alrededor de valores. De todos los sectores, con ideas distintas incluso, la disidencia chavista, sectores de la sociedad civil que nunca han querido estar en política y la diáspora venezolana que es una fuerza enorme e indispensable. Así que, sí creo que es importante una unión de estos sectores pero que estemos comprometidos en una ruta y no desviarse de esa ruta.
La dictadura tiene que salir. Aceptar luchar en los términos y en los plazos que impone la tiranía es un error garrafal. Fíjate como utilizan el tiempo a su favor para asfixiar y además, no tienen palabra. Todas estas operaciones oscuras tienen que quedar atrás.
Una y otra vez, después de que lo han negado, nos enteramos que hay reuniones en República Dominicana, que ellos llaman dialogo y que no lo es. Eso les da oxigeno y no puede repetirse. Entonces, se necesita una conducción política que genere confianza.
-¿Quién podría tener esa conducción?
MCM: Nosotros estamos construyendo una gran alianza ética que requiere una convergencia de esfuerzos. Dirigentes y lideres de las universidades, sindicatos, los estudiantes, la resistencia, los partidos, desde luego. Es un gran esfuerzo que estamos haciendo. Incluso, partidos que se fueron por esta ruta del 15 de octubre y que están viendo que hay que replantearse una nueva forma de organización.
No pueden ser decisiones que se tomen por cogollos. Eso ya se vivió y no funciona. No es lo que el país esta requiriendo dada la naturaleza de la lucha que enfrentamos.
-Pero hay una realidad. Lo ocurrido con los gobernadores precipitó las diferencias en la MUD. ¿Coincide con Henrique Capriles y Voluntad Popular en que hay que sacar a Acción Democrática de la alianza opositora?
MCM: Es un error garrafal plantear la discusión ahorita en torno a las posiciones de los partidos. Es no entender nada. Hay una sociedad que esta muriendo de hambre. Es un momento para decir: ya va. Se cerro un ciclo. Aprendamos de los errores y aciertos. Estamos enfrentando un régimen totalitario, que no es lo mismo que una dictadura. Que ya además, descontó el costo del fraude. No les importa. Después de lo de Smartmatic, se quitaron la careta.
Entendamos, hay que avanzar con otras formas de organización. Hay que escuchar la desesperación de la gente que dice que no puede esperar un año mas sin que pase nada. Cómo le dices a una familia que ve huir a su hijo que hay que esperar un año a ver si la dictadura quiere hacer elecciones el año que viene.
Tenemos la fuerza pero hay que direccionarla con inteligencia y una estrategia clara y hablándole con la verdad a la gente. No es una ruta fácil. No estoy diciendo que lo sea. Se necesita una enorme preparación intelectual, física y espiritual, estoy convencida que la tenemos. Ahora, también hay que decirle a la comunidad internacional que aquí hay una dirección política que no se va a desviar.
Cuando escuchas a Luis Almagro y a los ex presidentes te das cuenta la razón que tienen al pedir coherencia. Ha costado mucho explicarles que lo que se vive en Venezuela no solo es un drama que cobra vidas de venezolanos o un problema migratorio, sino que es una amenaza real para el hemisferio. Es un estado criminal que tiene vínculos hasta con el terrorismo islámico.
La comunidad internacional esta dispuesta a actuar pero tiene que haber una contraparte que articule y coordine los esfuerzos tanto de la gente, la calle como de la institucionalidad. Juntos, esto nos tiene que llevar a un nivel de presión tal que Nicolás Maduro entienda que es mucho mas costoso permanecer en el poder que irse.
Eso es una negociación real. Decir, estas son las garantías. Estos son los términos pero se tienen que ir. Lo otro, lo que se ha hecho hasta ahora, es una farsa. Así como el 15 fue una farsa de elección, eso es una farsa de diálogo que lo único que ha dado es estabilidad y tiempo al gobierno. Eso el país, hoy lo repudia. Es momento de pasar a una nueva forma, estructura y organización y hay que hacerlo con una enorme humildad y con una enorme amplitud.
Por eso estamos escuchando a todo el mundo y estamos recorriendo el país. Aquí como ciudadanos, nos necesitamos todos.
-¿Cómo eleva el costo político al gobierno si ya se vivieron cuatro meses de protestas con más de cien muertos?
MCM: Estuvimos a esto de lograrlo. El 16 de julio y después, el 30 de julio, fueron dos momentos de un punto cumbre de energía en el cual tenían que aceptar que viene la transición. Y en ese momento paso lo mismo que cuando el bloqueo del revocatorio.
Te madrugan con una válvula de escape. El año pasado fue el dialogo. Este año con unas supuestas elecciones regionales.
¿Qué había que hacer? Mantenernos firmes a la ruta del 16 de julio.
¿Quién convocó al plebiscito? ¿No fue la Asamblea? ¿Qué dice la tercera pregunta? Renovación de los Poderes Públicos.
¿En qué momento y quiénes decidieron obviar esto? ¿Por qué a estas alturas no hay un nuevo CNE? Allí no se puede culpar a unos diputados de un partido político. Esa fue una decisión política mayúscula con mas de siete millones de venezolanos avalándolo.
Yo voy a decir algo que no he comentado nunca. Yo estuve involucrada muchísimo en la organización del 16 de julio. En todo el diseño y la organización. Y cuando estábamos redactando las preguntas, muchas personas me decían que ni de broma se podía hacer esa tercera pregunta en que se le decía a la Asamblea cuál es su trabajo. Y dijimos que eso le daría fuerza al Parlamento, con un mandato renovado.
¿Crees que creíamos que se le iba a dar la espalda a eso? Y no me vengan con el cuento de que los van a perseguir. Desde luego que los van a perseguir pero tu tiene unos Magistrados que ayer sacaron una decisión con un enorme coraje, legítimos, reconocidos por la OEA y sentenciaron que esa Constituyente es ilegítima.
Ahora, claro se presentan estos gobernadores y el mundo se pregunta, ¿en qué momento se cambio la ruta?
-Usted insiste en el tema de la renovación de Poderes, pero, ¿a quién nombras que este dispuesto a irse exiliado? Porque eso es una realidad. ¿Cómo se sostiene un país paralelo?
MCM: Paralelo no. El verdadero. Me decían que había dos Asambleas y no. Hay una. Lo otro es un parapeto
-Pero toma decisiones…
MCM: Es verdad. Porque es una dictadura. Cuando te dicen que no vamos a conseguir personas que acepten el cargo, es conocer bien poco el país. Claro que es una decisión mayúscula. Son cinco personas a las que les va a cambiar sus vidas pero te aseguro que esos Magistrados que tomaron esa decisión, con el apoyo de la gente y del mundo, no se arrepienten. Lo que no se puede es dejarlos olvidados.
-¿Y no ha pasado eso?
MCM: Yo creo que la Asamblea Nacional debe ratificar y reconocerlos como todo el país. Tenemos que hacer más. Allí están. Es el legítimo TSJ y a ellos es que debemos recurrir.
Después de lo que se vivió el 15 de octubre, alguien cree que es posible ir a un nuevo simulacro electoral con este CNE. De verdad la Asamblea no va a hacer nada antes. Eso es su obligación para avanzar en el camino del desconocimiento de la dictadura.
-La Causa R proponía unas primarias para elegir de una vez a un candidato presidencial, ¿usted participaría?
MCM: Es que esto va mas allá de una persona. Esto debe incluir a todos los sectores. Esto debe ser un gran movimiento. Me parece valido que todo el mundo produzca propuestas e ideas de cómo avanzar. Tenemos una ventana de oportunidades que se nos puede cerrar.
-Pero lo que plantea no excluye a esta propuesta de tener una cara visible que aglomere el sentir opositor
MCM: No. Pero en estos momentos no estoy pensando en ningún tipo de candidaturas sino en la fuerza para producir realmente la derrota de la dictadura
-Pero no cierra esa puerta
MCM: Creo que hay que escuchar todas las propuestas y ver en qué momento son más efectivas unas u otras. Yo parto de la base de que el primer paso debe ser agregar esta energía y organizarnos.
-¿Esta plataforma de “Soy Venezuela” podría sustituir a la MUD?
MCM: Creo que son dos cosas distintas. Aquí se cerro un ciclo con enormes logros y aciertos pero también con grandes errores de los cuales tenemos que aprender pero no nos podemos quedar pegados allí. No hay tiempo que perder. Soy Venezuela plantea una forma totalmente distinta de organización.
-¿Esto no reedita lo que fue la Coordinadora Democrática?
MCM: Quizás en la aspiración de que la sociedad este involucrada y activa. Y eso es muy válido. Pero hay que aprender de los modelos y ser objetivos en lo que se logro de cada uno.
-¿Cómo seria la toma de decisiones con este nuevo modelo de organización en cuanto a la capacidad de respuesta ante lo que ocurra? Entendiendo que espera que sea muy amplia.
MCM: Eso es un debate emocionante porque son los costos de transacción de la democracia. Al final, tu ves estructuras como el PSUV que a quien se le ocurra chistear queda execrado.
Lo que estas planteando es un desafío gigantesco. Cómo incorporar a mucha gente y a la vez cómo ser eficiente en la toma de decisión. Eso es lo que estamos evaluando. Al final. Yo creo que si tienes valores y un propósito muy claro, y ese era uno de los problemas de la MUD y por eso Vente no firmo el reglamento porque en nueve comunicaciones pedimos que se definiera el propósito.
Tu al final, puedes someter al debate una decisión y tus tácticas y a veces ganas y a veces pierdes pero el propósito, eso no se somete a votación. El objetivo de esta alianza es restituir la República y eso significa sacar a las mafias y la dictadura del poder lo antes posible. Y allí hay un tema: lo antes posible. Eso es medular.
Si eso esta claro, la toma de decisiones es mucho mas sencilla. En estos momentos, no es un problema de partidos políticos porque no es una lucha electoral, es una lucha existencial contra un totalitarismo.
-¿Cómo se hacen efectivos los mandatos del TSJ y de un posible CNE? Que sí, son reconocidos afuera pero aquí adentro, ¿cómo se concretan sus decisiones?
MCM: En el caso del CNE, yo no voy a simplificar esto. Eso representa un desafío organizativo. Pero si tienes un CNE que empieza a establecer criterios y parámetros y convoca a unas elecciones como son y se logra una enorme movilización ciudadana en el que se empodere, eso es una ruta.
El 16 de julio fue reconocido por países alrededor del mundo y quienes actuaron como garantes fueron los rectores de las Universidades. Si ahora tu tienes una asamblea legítima nombrando rectores respetables, que es una ruta de desafíos, sí pero es la ruta de construcción de la verdadera libertad.
Que no es fácil, no. No lo es. Es una ruta de lucha contra la tiranía y es la única manera de visualizar un cambio político. De lo contrario, lo que plantea el gobierno es la sumisión.
Aquí se esta chantajeando a los familiares de presos para que vayan a la Comisión de la Verdad y lo mismo están haciendo con dueños de medios, comerciantes y a partidos políticos. Sino, mira lo que paso con estos gobernadores “electos”.
Frente a esto, no hay opción más que rebelarse contra la Constituyente.
-¿Por qué entrecomilla que sean unos gobernadores electos?
MCM: Porque para mi, eso no fue una elección sino un ejercicio militar. No fueron unas elecciones libres.
– Su posición ante el anuncio de las elecciones municipales?
MCM: La misma que hemos dicho desde el primer día. Aquí nadie puede reconocer la Constituyente. Aquí hay un mandato del 16 de julio. Aquí hay un país exigiendo. Veinte meses tiene la Asamblea instalada y no hay un nuevo CNE. Es inadmisible.
-¿Considera que el tiempo le ha dado la razón?
MCM: Yo creo que hemos aprendido todos. Creo que es un momento de actuar con amplitud y humildad. Proactivamente y eficientemente y rápidamente. El tiempo del país y de la gente es el tiempo del hambre y eso no espera.
Es peligrosísimo llegar al punto de que la gente te transmita que se vayan todos porque se siente traicionada y engañada.
-¿Cree que estamos en ese punto?
MCM: Creo que estamos en un alto riesgo. Veo ese sentimiento en mucha gente y creo que es un momento en el que hay que hablar con total verdad. Decir que nos equivocamos pero seguir para adelante, luchando juntos. Es un país que se desmorona. Y por primera vez, con una comunidad internacional dispuesta a actuar pero hay un escenario geopolítico que no es estable.
Vienen elecciones en Colombia, México y Brasil. La correlación de fuerzas puede cambiar en la región y mientras tanto, la gente en Venezuela muriéndose de hambre. Podemos estar peor y la única manera de evitarlo es sacar a las mafias.
Hay tanta gente queriendo mantener el status quo. Están convirtiendo el hambre en un mecanismos de control y se han superado en perversión. El país esta exigiendo una forma muy distinta de hacer política.
-¿Esto que esta pasando con la MUD es, o puede ser, un borrón y cuenta nueva para recomponer fuerzas y limar asperezas? ¿Podría verse remando juntos a María Corina, Capriles, Voluntad Popular?
MCM: Te repito lo mismo. Nos estamos concentrando donde no es. Lo importante es una unidad de valores. Pueden haber distintos partidos. A mi me han llamado personas de todos los partidos para luchar. Si compartes estos valores, claro que podemos caminar juntos. Pero es una alianza ciudadana, ética con un solo propósito: derrotar la dictadura.
– ¿Ha mantenido comunicación con altos dirigentes opositores?
MCM: (Risas)… He mantenido comunicación con mucha gente de distintos partidos.