Las fallas en el sistema eléctrico han llegado a un punto en que se consideran alarmantes y como los afectados severamente son los usuarios debemos unirnos para buscar soluciones inmediatas.
Sabotaje, La iguana, El Niño, la Niña, Injerencia extranjera, son las causas que señala el Gobierno sobre los apagones en Venezuela, según el ministro Luis Motta Domínguez, cuya tesis debo rechazar. Lo cierto es que los usuarios padecemos las erráticas políticas que han manejado para el sector. La situación que se vive en los estados del Occidente del país es dramática. Son más de 48 horas sin luz, intermitencia en algunos sectores, y nadie responde por la comida, por la nevera que se daña, por los electrodomésticos.
Lo que pide el gobierno es paciencia, y hace promesas de solución en el corto plazo, tratando de hacer creer que se trata de algo puntual, cuando en realidad es consecuencia de una desinversión profunda en el sistema, una evidente falta de mantenimiento. Se paraliza la vida en esos estados ya que sin luz no puedes hacer nada. Los 15 días anunciados por las autoridades del Ministerio del Poder Popular para la Energía Eléctrica previstos para solucionar el problema no son suficientes. El problema no es coyuntural sino estructural. La situación en la región occidental del país es una situación generada por la falta de planificación en el sector, ya que si bien la situación se genera por un déficit en generación de la hidroeléctrica de la región, no todo puede achacarse a un fenómeno natural.
Esto es una situación que se pudo evitar de haberse aplicado el mantenimiento pertinente a las instalaciones termoeléctricas de manera que puedan satisfacer la demanda, y aporten la cantidad de megavatios una vez que se constate la indisponibilidad de las plantas hidroeléctricas. Los apagones se traducen en pérdidas materiales considerables tanto para los usuarios residenciales como comerciales. Es alarmante el número de fallas reportadas por los usuarios a nivel nacional por la crisis en el sistema Eléctrico Nacional. Es necesario que el Ministro dé un balance real y efectivo de la situación del Sistema Eléctrico. No podemos seguir improvisando. Quienes padecemos somos los usuarios, por eso tenemos que organizarnos y solicitar que se fiscalice el sistema eléctrico como establece la «Ley Orgánica del Servicio Eléctrico» que en su artículo 34 numeral 2, nos da esa facultad a los usuarios. Así podemos colaborar a fin de buscar soluciones necesarias para que de una vez por todas haya solución sobre la mesa. Finalmente, como medida, el Ministerio aplicará racionamientos a los cuatro estados afectados. Este racionamiento no es otra cosa que apagones legales.