De hecho, Maduro bajó los salarios

Por Alex Vallenilla

Más nadie que los mismos jerarcas de la administración Maduro saben que cada aumento del salario mínimo, sin haber presupuesto para ello y utilizando la emisión de dinero del Banco Central de Venezuela (BCV), deriva en más inflación, debido a que la oferta monetaria sube y entra a un sistema económico en que no hay oferta de bienes y servicios suficientes para toda la población, lo que hace saltar los precios de manera descontrolada, como viene ocurriendo hasta ahora. Desde el mismo Ejecutivo se promueve el alza de precios y los errores que han creado esta crisis se siguen multiplicando de manera más acelerada, tal como acaba de ocurrir el pasado lunes, cuando el mandatario venezolano, en medio de una campaña electoral atípica, anunció un nuevo aumento de salarios de grandes proporciones con relación a los aumentos anteriores que ya había aplicado.

El resultado es que con ese anuncio, los salarios han sido disminuidos. El efecto inflacionario genera una caída drástica del poder adquisitivo y todos los bienes que se denominen en bolívares, tienen un alza sostenida, mientras que el ingreso del venezolano sigue en declive al no tener aumentos en la misma proporción en que avanzan los
precios generales.

Pánico en la población.

Ya hay conciencia en los venezolanos que con la actual estructura económica, cada aumento de salarios se traduce en alza de precios generales, lo que ha dado “vida propia” a la inflación y ha generado alza súbita en los precios.

Luego del aumento anunciado, en este proceso de colapso general de la sociedad, el mandatario agrega más combustible al incendio que ya tiene ardiendo y que al final terminará arrasando todo, incluso a la élite gobernante.

En medio de ese caos, Maduro amenazó a los empresarios de aplicar medidas drásticas a quienes aumenten precios, sin embargo eso sólo sería para un sector, porque hay empresas venezolanas, que pasaron a manos de empresarios que tienen sendos vínculos con el oficialismo y sus precios se mantienen en alza constante sin ningún tipo de intervenciones valgan. Compañías con la marca como Diablitos Underwood, Firestone, Corporación Industrias Montana, algunas redes o cadenas de comercio, no reciben sanciones en ese sentido, los precios de sus rubros siguen en alza sin control
alguno.

El alza de precios se puede ver en la subida del dólar paralelo, que acumula en los últimos 12 meses aumentos de 18.616,32%, una proporción sumamente acelerada y que podría estar marcando el camino del rumbo que llevarán los precios generales en todo el país.

Incertidumbre general

La incertidumbre que hay en Venezuela es la más grande que se haya tenido hasta ahora. En medio del colapso general de todos los sectores, hay un proceso electoral en desarrollo, en el que los factores de oposición no están participando y promueven no votar, debido a los anuncios de la comunidad internacional de no avalar el resultado, sea el que se produzca.

Otro grupo de la población, sí está dispuesta a participar en el evento electoral, se trata de sectores populares que ven una oportunidad de cambio. Hasta ahora, las encuestas más serias indican que habrá una participación de al menos 50%, sin embargo el escepticismo que hay en partes de la oposición, se fundamenta en que no será una elección transparente o libre, en la que muchos no creen.

La fuerte subida del salario mínimo tiene un mensaje implícito. El oficialismo busca impactar sectores afectados por la crisis para motivar el voto en su favor, lo que pudiera significar que en el sector oficialista no están seguros de una victoria, precisamente por los efectos de la crisis económica. El salario mínimo fue aumentado a 1.000.000,00 de bolívares, desde 392.646,00 bolívares, es primera vez que se sube 154,68%. El bono alimenticio pasó de 915.000,00 mil bolívares a 1.555.500,00 bolívares, de manera integral el Ejecutivo subió 95,42%. Hay que señalar que es primera vez que el gobierno aplica un incremento en tales proporciones y lo hace en medio de unas elecciones que tal vez pudieran complicárseles.

A pesar del fuerte incremento salarial – o quizás por su causa -,  la crisis ha causado tales estragos en la economía, que el mismo es insuficiente. El salario del venezolano quedó entonces en 2,94 dólares al mes incluyendo el bono alimentario, lo que hace imposible dar cobertura a prácticamente nada para el consumo.

Los factores de peso
El deterioro de la economía tiene su peso en dos factores: una alta emisión de dinero desde el BCV y la falta de producción interna.

El pasado mes de abril, la liquidez monetaria dio otro fuerte salto, aceleró a 5,95 billones de bolívares, el máximo histórico jamás registrado. Subió desde 4,23 billones de bolívares registrados el pasado mes, con un incremento de 40,63% contra el mes de marzo y otra alza record de 3.841,19% en los últimos 12 meses. Continúa de esta manera la política expansiva que aplica el Ejecutivo con el propósito de sostener artificialmente los sueldos y salarios, y lo que ahora llaman los “bonos de la patria”, que no es otra cosa que entregar dinero inorgánico virtual  a través del Carné de la Patria, lo que igual significa más inflación y menos valor del ícono monetario nacional.

Maduro baja los salarios

Miantras el efecto inflacionario genera  una caída drástica del poder adquisitivo en bolívares, el alza se mantendrá en la misma proporción en que avanzan los precios generales. La crisis se mantiene porque a pesar de que el gobierno ha aumentado los salarios en 1.177,61% en el último año, la inflación estimada para 2018 se ubica en casi 10.000% aunque pudiera ser más, visto como el dólar en los mercados libres, ha mostrado el alza citada anteriormente. Para julio de 2015, ya con la crisis avanzando, el salario mínimo se ubicaba 71 dólares al cambio libre para entonces, actualmente queda en 2,94 dólares, hace un año era de 37,16 dólares mensuales.

Petróleo en alza
Las reservas internacionales volvieron a sufrir otra caída, aunque esta vez ésta se ha desacelerado, el recorte fue de -2,93% respecto al mes de abril del año pasado y se ubicaron en 9.871 millones de dólares. La razón es que el gobierno ha visto incrementar en algunos puntos los ingresos por la vía petrolera, luego que en el último año el precio del petróleo ha subido 54,73%, desde 40,72 dólares a 64,15 dólares el barril al cierre de abril de este año. El impacto financiero es menor porque a pesar del alza de precios, Pdvsa continúa con graves problemas de producción y de flujo de caja, al ir disminuyendo la extracción de petróleo por la falta de inversión y los daños que sufre la empresa estatal. Taladros cerrados, pozos con daños, gabarras paradas y una fuga de personal calificado que no han podido detener, hace imposible lograr que se detenga el desplome productivo, lo que afecta las finanzas de la estatal y del mismo gobierno. Toda la distorsión económica existente, afecta los precios de todos los sectores. Esta semana que termina, los reportes abundan en las redes sociales, con productos como un detergente lavaplatos de apenas 500 gramos, en 1.050.000,00 bolívares o un cartón de huevos sobre 1.600.000,00 bolívares. La reciente subida de salarios apuntalará mucho más los precios, la mayoría de comerciantes tenían las ventas detenidas el pasado lunes, en espera de nuevos precios de las compañías después del aumento de salarios.
/ @alexvallenilla