Por.- Juan Fernández
El petróleo marcha así: Según la agencia Reuters, se trata de compras del orden de 500 mil barriles, con la dificultad que los vendedores no confían en el pago y lo piden adelantado.
Concluye mayo con el precio más alto del 2018: el Brent en US$76,95 por barril y el WTI en US$70,08 por barril. Este precio significa aproximadamente un 10% más que en enero de 2018 y con respecto al mes de abril un aumento del Brent igual a US$5,2 por barril y del WTI de US$3,7 por barril. Las razones del aumento se basan en el exceso de cumplimiento del acuerdo OPEP – No OPEP de reducción de suministro para el mes de abril, la cual como hemos indicado anteriormente, es debida a la caída de la producción de Venezuela, a lo que se le agrega la salida de los EEUU del acuerdo nuclear con Irán, con un impacto en el suministro de petróleo del tercer productor de la OPEP estimado de hasta un millón de bpd por la dependencia del plan de desarrollo iraní en la inversión europea. No obstante lo anterior, el objetivo del acuerdo, fue lograr re balancear el mercado para llevar el exceso de inventarios al promedio de 5 años.
Según información de Platts, dada por un representante de la OPEP, los niveles de inventario de la OECD están por debajo del promedio, en 20 millones de barriles. El último estimado de la OPEP para marzo fue de 2.829 millones de barriles, unos 9 millones de barriles por encima del promedio de 5 años. No obstante lo anterior y debido a la escalada del precio ocurrida durante mayo, con niveles que no se observaban en el mercado desde noviembre 2014 cuando el Brent tocó los US$80 por barril, el mercado comenzó a señalar preocupación por la posibilidad de un retroceso en el crecimiento del PIB global. Por otro lado, está el complejo proceso geopolítico del Medio Oriente por el conflicto entre suníes y chiítas, la vuelta de las sanciones a Irán con un potencial impacto en el transporte de crudo a través del estrecho de Ormuz y el colapso de PDVSA.
Reunidos en San Petersburgo, el ministro de petróleo ruso, Alexander Novak, y el ministro de Arabia Saudí, Khalid al-Falih, acordaron aumentar y flexibilizar el suministro al mercado hasta 1 millón de barriles por día, para compensar la caída de la producción de Venezuela y disminuir la preocupación del cierre de producción iraní. La propuesta conjunta será llevada a la reunión ordinaria de la OPEP en junio. La respuesta del mercado ante el anuncio, fue reaccionar hacia la baja. De todas formas las expectativas de la reunión de la OPEP son básicamente de seguir con el acuerdo y en especial para Arabia Saudí, consiste en mantener un precio sobre los US$80 dólares, con el objetivo de maximar el valor de Saudí ARAMCO cuya OPA seria en 2019.
Por último, la semana de mayo 25, según la data de Baker Hughes, el número de taladros en los EEUU es de 1.059 de los cuales 859 son destinados al petróleo, 198 para gas y 2 para otras actividades. El dato significa un aumento de 151 taladros con respecto al mismo periodo del año pasado. Los niveles de inventario con respecto a la semana pasada se incrementaron en 5,8 millones y se ubicaron en 438,1 millones de barriles.
Canadá.
Canadá está actualmente con una producción de 4,0 millones de bpd, exportaciones del orden de 3 millones de bpd, con reservas del orden de los 171 mil millones de barriles, una de las más importantes del mundo. Su mercado principal son los EEUU, dentro de su estrategia de diversificación está la expansión del oleoducto de Trans Mountain con una capacidad de 300 mil a 890 mil barriles, que transporta desde Alberta hasta Columbia Británica, lo cual facilita una salida por el Pacifico al crudo canadiense. La empresa Kinder Morgan había fijado una fecha para decidir, considerando las dificultades por el debate ambiental y el gobierno regional de Columbia. Como consecuencia de lo anterior, el gobierno canadiense decidió adquirir el oleoducto por un precio de US$3.500 millones. El ministro de Finanzas, Bill Momeau, dijo que la compra del oleoducto y su expansión, se debe a la intención de asegurar el transporte de crudo de Alberta hacia Vancouver y destrancar la situación actual de paralización de la expansión, pero que posteriormente, el gobierno canadiense transferirá, venderá el oleoducto a inversionistas privados.
El crudo canadiense compite directamente con el venezolano, con la posibilidad cada vez mayor de ser competitivo por el uso de oleoductos como el Keystone llevando crudo a la Costa del Golfo y ahora con este oleoducto Trans Mountain. Mientras tanto Venezuela sigue cayendo en sus exportaciones al mercado que mejor paga el crudo venezolano.
Venezuela
La agencia Reuters informa de nuevo sobre la compra de Diesel, Nafta y gas por parte de PDVSA, una evidencia más de su problemática operativa en las refinerías y en producción. Estas compras del orden de 500 mil barriles, son con el propósito de diluir crudo de la Faja, para ser procesado en los mejoradores de Jose o para luego ser vendido, por ejemplo como Merey 16, al mercado. Adicionalmente, los oferentes de los productos, con seguridad harán las ofertas bajo esquemas de prepago considerando el flujo de caja negativo de PDVSA y su historial de incumplimiento de pagos de cuentas comerciales, así como por las sanciones financieras que limitan el financiamiento de la petrolera y los traders toman en consideración estos elementos para realizar las ofertas.
También durante la semana hubo especulación sobre la salida del M/G Manuel Quevedo como Presidente de PDVSA y Ministro de Petróleo, para ser reemplazado por Ali Rodríguez Araque en PDVSA y Mendoza Potella en el Ministerio de Petróleo, ambos personajes con responsabilidad en la debacle de la industria petrolera. Nicolás Maduro solicitó a la dirigencia sindical gobiernera representada por Wills Rangel, que aumenten la producción y ratificó al M/G Quevedo, que en nuestra opinión viene ejecutando el cierre de PDVSA. Como es prueba de vida de los venezolanos por los efectos de la severa crisis económica que vive el país, el modelo económico actual está probado que no funciona.
El régimen de Maduro, que mal gobierna y tampoco tiene la voluntad de corregir, ni de hacer los cambios estructurales requeridos, nos lleva a la autarquía económica, contraria a la tendencia de aprovechar las ventajas de ser partícipes de la economía global. El negocio petrolero es global y requiere la inversión continua para mantenerse, el proceso electoral del 20M fue catalogado como fraude, cuyo resultado son sanciones, las cuales se siguen ampliando con la participación además de los EEUU, de la UE, G7, México y Canadá.
Además, el régimen sigue insistiendo en despreciar el conocimiento como herramienta para gerenciar la actividad petrolera y pública, con solamente tener afinidad al modelo y mostrarse fiel a la supuesta revolución, son las condiciones para ocupar cargos de responsabilidad, sin importar méritos, pericias y conocimientos. Varios analistas vuelven a mencionar que la producción venezolana puede caer por debajo del millón de bpd. Por lo tanto el panorama es desolador para todos, de continuar el modelo económico de la supuesta revolución.
Hasta la India en donde el gobierno habría ofrecido un descuento del 30% en las compras a PDVSA si utilizaba el PETRO, no lo utilizará como medio de pago. Cada vez más hay menos opciones para Maduro de solventar la crisis económica y PDVSA no es instrumento para la solución. Queda en manos de nosotros los ciudadanos lograr el cambio para recuperar la economía del país y generar un estado de bienestar aceptable, con creación de riqueza y oportunidades para todos.
@JFernandeznupa