Organismos internacionales no coinciden en la percepción de lo que realmente sucede en Venezuela

Por Jaime Granda

Los organismos internacionales no coinciden en la percepción de lo que realmente está ocurriendo en Venezuela.

La comunidad y los organismos internacionales están confundidos con lo que ocurre en Venezuela, pero no es para despotricar de ellos ni echarlos a un lado. En realidad lo que pasa en Venezuela no está siendo percibido en sus justas dimensiones por gran parte de su dirigencia política, tanto del gobierno como de la oposición.

Días atrás, personas ligadas a las organizaciones sociales, religiosas y sanitarias que están ayudando en Colombia a los refugiados venezolanos advirtieron sobre el peligro de que su labor fuera asumida por políticos venezolanos para ganar indulgencias con escapulario ajeno, como se dice. Después se confirmó que los eurodiputados que visitaron al hermano país no quisieron hablar con los políticos venezolanos que andaban por esos rumbos.

La convicción de los voceros de organismos que ayudan a los refugiados en Colombia es que en Venezuela se ha devaluado la moneda, pero también se ha devaluado en gran medida la clase política de uno y otro bando.

Uno puede comenzar por advertir que en cuanto al término “revolución”, tan repetido por los gobernantes actuales de Venezuela, no encaja en lo que definen los diccionarios. Esta “revolución” se quedó en el simple significado de la palabra latina “revolutum” que se puede traducir como “dar vueltas”. Esta revolución chavista ha pasado 19 años dando vueltas mientras el país se cae a pedazos.

En cuanto a las contradicciones de los organismos internacionales, a la vista de todos, destacan varios hechos.

Por un lado, el Registro Administrativo de Migrantes Venezolanos que realizó el gobierno colombiano precisó que 35.976 niños venezolanos se quedaron sin alimentos en los últimos tres meses y las cifras de niños muertos por falta de atención hospitalaria, por abandono de sus madres ante la falta de comida o por desnutrición, crecen día tras día. Sin embargo, el Comité de Derechos del Niño de la ONU reeligió entre sus miembros, con un total de 119 votos, al representante del gobierno venezolano y, por supuesto, que el gobierno alardea que eso es un reconocimiento a su buena labor en esa materia.

Lo peor para el gobierno es que «Save the children», la organización que promueve y defiende los derechos de los niños y adolescentes, reveló en informe de esta semana que ubica a Venezuela entre los países donde muchos menores pierden su etapa de la niñez por las condiciones de vida reinantes. Venezuela quedó en el puesto 129 de 175 países evaluados. Inmediatamente detrás de Venezuela se encuentran Bangladesh y Uganda. Los peores clasificados son la República Centroafricana, Malí y Níger.

También es una contradicción evidente que Nicaragua, en plena crisis por las protestas populares contra el presidente Daniel Ortega y su salvaje represión que ha dejado 300 muertos, invite a militares de Cuba, Rusia, Venezuela y Estados Unidos, para realizar operaciones de adiestramiento e intercambio de experiencias.

Algunos medios agregan que hasta 2.000 fusiles AKM cal7, 62×39 con 6.000 cargadores y 1.000.000 de cartuchos del mismo calibre cubanos serían recibidos en Nicaragua transportados por un barco militar venezolano, se pudo conocer de manera extraoficial. El barco “T91 los Frailes”, también transportaría cuatro vehículos antimotín de la Guardia Nacional Bolivariana.

@jajogra