La clase media es la más clara y la que termina luchando contra proyectos políticos destructores de la calidad de vida como el régimen actual en Venezuela. Miembros del Sindicato Venezolano de Maestros protestan frente al Ministerio Publico el lunes 01 de octubre de 2018  en Caracas. Foto: EFE Miguel Gutiérrez

El odio a la clase media

Por Jaime Granda

***La clase media es la más clara y la que termina luchando contra proyectos políticos destructores de la calidad de vida como el régimen actual en Venezuela.

Los mismos seguidores del socialismo deberían desenmascarar a los que desvían las teorías originales por intereses grupales que niegan todo beneficio a la sociedad en general.

Lo único claro en los países donde se ha pretendido imponer el supuesto socialismo marxista es que esos países terminan empobrecidos aunque, como en el caso venezolano, sean ricos en petróleo, oro, coltán y otros valiosos minerales.

Los grupos que se apoderan del Estado echan a la basura todas las promesas de reivindicación de la clase baja y de inmediato buscan igualarse con la clase alta merced el saqueo del patrimonio estatal.

Como consecuencia de esa desviación de lo prometido, los pervertidos “socialistas” enfatizan, la lucha de clases contra la clase media porque es la que realmente termina enfrentando esos proyectos que nada tienen que ver con las teorías políticas que se siguen repitiendo en nuestras universidades.

Actualmente en Venezuela es cotidiano ver cómo los integrantes de la clase baja muestran el odio inculcado por los gobernantes de turno hacia la clase media, a la que abiertamente niegan toda posibilidad de compartir  los pocos alimentos que hay y para cuya adquisición hay que hacer enormes colas. Las agresiones en esas colas contra los que los de clase baja consideran clase media son muy frecuentes y han ocurrido muertes, sin que haya rechazo oficial hacia esas acciones.

Para entender un poco la estrategia de inculcar odio hacia la clase media, habrá que recordar que la misma surgió en el siglo XVIII con la industrialización y el desarrollo de nuevos trabajos que abrieron la posibilidad de ascenso social para los grupos más decididos a mejorar sus niveles de vida.

Cuentan que mientras se expandía la brecha entre los obreros (la clase baja) y los capitalistas (la clase alta) surgieron diversos profesionales y pequeños propietarios que comenzaron a destacar por sus éxitos y se convirtieron en la clase media.

Ya en el siglo XX surgió la clase media moderna en América del Norte. La industria automotriz, entre otras, empezó a utilizar técnicas de producción novedosas gracias a lo cual fue posible reducir los precios y aumentar los salarios de los trabajadores. De este modo, una porción de la población de bajos recursos se enriqueció y accedió a mejores condiciones de vida.

La Historia dice que quizás una de las características más sobresalientes de la clase media es que la mayoría de sus integrantes no se sienten molestos por pertenecer a ella (como sí puede ocurrir con la clase baja) ni temen descender (algo que preocupa a la clase alta). Ser de clase media tiene muchas ventajas con respecto a las otras dos. Lo positivo de la revolución industrial es que muchos obreros (la clase baja) lograron mejorar sus niveles de vida y sus hijos se convirtieran en profesionales exitosos, lo que los incluía en la clase media.

Lamentablemente, ese proceso que parecía parte de la rutina en Venezuela ha sido interrumpido y la clase media, la más clara, al igual que los hijos de obreros que van en ascenso, son los que se enfrentan a los responsables de esa interrupción que además han puesto a pasar hambre a la clase baja y ocasionado grandes pérdidas a la clase alta, lo que se traduce en pérdida de empleos para los aspirantes a clase media.

@jajogra