CORTO Y PROFUNDO
Por RAFAEL POLEO
Lo que ocurre en Barinas es un nuevo episodio de Maduro vs Diosdado. Nicolás quiere arreglo. Acepta la derrota en el estado llanero, pero Diosdado -cuya situación ante el mundo occidental le impide transigir- usa a la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia para sabotear. El madurismo convenció a Argenis Chávez, hermano del difunto, de, al menos, renunciar a renovar su cargo como gobernador.
Mientras tanto, Rafael Sarría, hombre clave de Diosdado, es detenido en Madrid. Son noticias que acorralan a Cabello, que no cambia su situación de hombre acorralado.
Téngase en cuenta que Maduro, junto a Jorge Rodríguez, ha pactado regularizar la situación venezolano. Diosdado, y los más radicales del PSUV, no lo aceptan porque serán ellos los sacrificados. El fraude escandaloso en Barinas sabotea ese acuerdo logrado por el madurismo.
La intransigencia de Diosdado se debe a que está marcado como el chivo expiatorio, el que será lanzado a los leones. Véase que la detención de Rafael Sarría, su operador financiero, se produce tras la decisión de la Sala Electoral del TSJ, presidida por una ficha del cabellismo.
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