*** Monica Vitti, la antidiva de la comedia italiana, falleció en Roma a los 90 años.
Por EDUARDO MARTÍNEZ – Corresponsal en Italia
A los 90 años, en la tranquilidad de sus últimos 20 años, falleció Monica Vitti en su casa de Roma este 2 de febrero.
Aquejada de alzheimer, la antidiva de la escena italiana se había ido encerrando en su enfermedad hasta perder su memoria y toda conexión con el medio artístico que la vio nacer, desarrollar y deslumbrar en la apoteosis del cine italiano de los primeros 40 años de la postguerra.
Nacida como María Luisa Ceciarelli el 3 de noviembre de 1931 en Roma, y con un apellido difícil de pronunciar por sus coterráneos, se vio obligada a cambiarlo por Vitti, una extracción del apellido materno (Vittiglia), haciéndolo comercial para el cine italiano.
Llegó al cine, luego de pasar por la Academia Nacional de Arte Dramático (1953), el teatro -interpretando personajes del teatro clásico- y el cabaret. En 1954 debutó en el cine en la que sería su primera obra fílmica: ¡Reír! ¡Reír! ¡Reir!. Film que le abriría las puertas de una fecunda carrera cinematográfica. Se retiró en 1990, con el film Escándalo Secreto, que dirigió y protagonizó -ella misma- interpretando al personaje Margarita.
De una belleza deslumbrante y natural, sería algo más que una bella mujer. Fue una actriz de academia, que se fue forjando un perfil de comedia, y demostrando una gran dedicación al trabajo.
Para valorar su estatura en el cine, hay que considerar que le tocó competir con Sofía Loren y Claudia Cardinale, ante quienes se impuso con “su estilo, hecho de simplicidad y de gusto por la excentricidad”, como refirió a raíz de su fallecimiento la periodista Anna Lupini.
En efecto, en el trascurso de su carrera (1954-1990), Monica Vitti actuó en trece de esos años en más de una obra al año.
En 10 años (1962, 1963, 1964, 1969, 1975, 1977, 1978, 1979, 1981, 1982), actúo en dos films por año; en 2 años (1966, 1973) actuó en 3 films cada año; y en 1970 actúo en 4 films.
Actuando en el resto de los años, en un largometraje por año. Una intensidad de actuación que pudiera ser un récord entre sus contemporáneos.
No solo compartió roles protragónicos con los mejores actores italianos de esos años, sino que fue una actriz buscada por los más afamados directores: Alberto Sordi, Mario Monicelli, Luigi Zampa, Carlo Di Palma, Luis Buñuel, Ettore Scola, Vittorio De Sica, Tinto Brass, Luis Garcia Berlanga, Rene Clair, entre otros.
Desde finales de los años 50s, la Vitti mezcló su vida personal con su carrera. Fue pareja y Musa del director Michelangelo Antonioni. Bajo su dirección, protagonizó cinco largometrajes: La Aventura (1960); La Noche (1961); El Eclipse (1962); El desierto Rojo (1964); y, El Misterio de Oberwald (1981).
El realizador Mario Monicelli también la consideraba su “Musa”. Lo que la carecterizaría en la prensa especializada como la “Musa del cine italiano”.
También convivió con Carlos Di Palma, quien la dirigió en tres films en la década de los 70s.
Luego sería por 27 años la prometida del fotográfo Roberto Russo, con quien se casó en el 2000.
El recuerdo
La noticia de su muerte impactó la prensa italiana y la especializada en el mundo, dictó los titulares de este miércoles 2 de febrero:
CNN
Muere Monica Vitti, la “reina del cine italiano”, a los 90 años.
El Mundo
Muere Mónica Vitti, la mujer que detuvo el tiempo.
El País
Muere Monica Vitti, la antidiva del cine.
El Carabobeño
Muere a los 90 años, la “antidiva” musa de Antonioni.