***La ola de calor es la segunda registrada en menos de un mes en Europa, en plena campaña turística estival. Los termómetros registraron marcas históricas y España suma 510 muertos.
Por Casimiro Buenosvinos
La ola de calor que sacude en los actuales momentos varios países de Europa mantiene su paso avasallante cuando este lunes se registraron nuevos récords de temperatura en Francia, que vivió la «jornada más calurosa», y el Reino Unido, mientras que en España suman al menos 510 los muertos, según el último reporte del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), dependiente del Ministerio de Sanidad.
El servicio de meteorología Météo-France informó que en Brest (extremo oeste) la temperatura llegó a los 39,3 grados, cuatro grados más que el récord local anterior de 35,1 de agosto de 2003; 39,5 grados en Saint-Brieuc; 42 en Nantes y 42,6 en Biscarrosse (suroeste), según los valores provisionales.
El oeste de Francia se encuentra en «alerta roja» y al respecto François Gourand, meteorólogo de Météo France, anunció más temprano que «se espera un calor especialmente intenso, no una típica ola de calor de verano». Según este servicio meteorológico, «algunas zonas del suroeste» podrían vivir «un apocalipsis de calor» con hasta 44 grados. En tanto, las autoridades británicas decretaron el máximo nivel de alerta, el 4 o roja, por el riesgo que corren incluso las personas jóvenes y con buena salud, al tiempo que aconsejaron hidratarse, evitar exponerse al sol y vigilar a las personas vulnerables.
El país superó esta tarde los 38 grados y según la Oficina Meteorológica, el lugar más caluroso era en Santon Downham, Suffolk, sur de Inglaterra, donde el termómetro alcanzó los 38,1 grados.
Las escuelas de varias zonas cerraron y varias compañías de trenes llamaron a no viajar ni hoy ni mañana.
En Gales, la temperatura llegó a 37.1 grados, la más alta jamás registrada en esa región, informó el organismo, que reiteró una vez más que mañana alcanzarán máximos históricos. Las temperaturas en el Reino Unido rara vez superan los 35 grados y el récord más cercano fue de 38.7 en Cambridge en 2019, siendo el promedio durante el verano de 23 y 24 grados.
España también se encuentra en alerta roja por temperaturas que podrían alcanzar hoy los 42 grados.
En el interior de Guipúzcoa, los termómetros subieron a 41 grados, mientras que en la vertiente cantábrica de Navarra y el interior de Vizcaya alcanzarán los 42. Como consecuencia de la ola de calor, en Francia se produjeron alrededor de 8.500 evacuaciones en La Teste-de-Buch, cerca de Burdeos, y 3.500 en Landiras, Budos y Balizac.
En España, según el presidente del gobierno Pedro Sánchez, el fuego devastó 70.000 hectáreas desde inicios de año, «casi el doble de la media de la última década».
En Portugal se produjo un lunes más fresco, poniendo fin a una ola de calor de más de una semana, tras batir el jueves su récord de temperatura para un mes de julio, con 47 grados registrados en el norte, donde unos 800 bomberos seguían luchando contra cuatro incendios activos. En Bélgica, los meteorólogos anunciaron este lunes la alerta naranja en todo el territorio del país debido a la esperada ola de calor y un clima seco.
Mientras se esperan temperaturas por encima de los 40, la Compañía Nacional de Ferrocarriles de Bélgica SNCB informó de sus planes de cancelar alrededor de treinta trenes durante los días de más calor.
Holanda, que registró este lunes su día más caluroso en 2022, y Bélgica decretaron la «alerta naranja» el martes, al esperarse temperaturas próximas a los 40 grados, pero sin batir récords de calor.
Para los científicos estos fenómenos extremos son consecuencia directa del cambio climático, dado que las emisiones de gases de efecto invernadero aumentarían su intensidad, su duración y su frecuencia.
Por su parte, Alemania, Polonia, Hungría, Eslovenia y Croacia también se vieron afectadas, mientras que la cuenca del Po, en Italia, «se enfrenta al nivel más alto de sequía severa» en la UE, debido a una «sequía intensa» declarada en cinco regiones italianas, aseguró la Comisión Europea.
«En España, los volúmenes de agua almacenados en los embalses están en la actualidad en un 31%, por debajo de la media de la última década», puntualizaron.