***EEUU y Reino Unido anunciaron más sanciones a Rusia por los falsos referendos y la anexión de territorios ocupados.
Por José Piñeiro
El Departamento de Estado de EE.UU. anunció nuevas sanciones contra funcionarios de Moscú luego que el dictador Vladimir Putin firmara la anexión de los cuatro territorios ocupados por tropas rusas.
EEUU dijo en un comunicado que cientos de individuos, incluidos miembros del Ejército ruso y bielorruso, estarán sujetos a restricciones de visado, mientras que otros cientos recibirán sanciones económicas.
El presidente estadounidense Joe Biden condenó sin paliativos el “fraudulento intento de anexión”.
“Que nadie se llame a engaño”, dijo Biden. “Estas acciones no tienen legitimidad y Estados Unidos siempre hará honor a las fronteras ucranianas reconocidas por la comunidad internacional”.
Según el relato del mandatario norteamericano, con este “intento de anexión”, Rusia “viola el derecho Internacional, pisotea la Carta de Naciones Unidas y demuestra su desprecio por las naciones pacíficas de todo el mundo”.
Por su parte, desde Bruselas, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen fue enfática al decir que las anexiones de los cuatro territorios ucranianos ocupados “no cambia nada”.
En un mensaje compartido en su cuenta oficial de Twitter, la jefa del Ejecutivo europeo defendió que “todos los territorios ocupados ilegalmente por los invasores rusos son ucranianos y serán siempre parte de esta nación soberana”.
Por su lado, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel indicó que la UE no reconocerá ahora, ni en el futuro, las consultas “falsas” ni la anexión “ilegal” rusa y en un mensaje pidió un frente común en Europa ante “la nueva era” que supone el pulso de Putin.
“Nos debemos movilizar no por la guerra, sino para preservar la paz y proteger nuestra seguridad”, dijo el ex primer ministro belga, asegurando que los ciudadanos, líderes políticos y las empresas europeas tienen un “papel que jugar”.
Una defensa de las regiones ucranianas similar a la que ha hecho el Alto Representante de la UE para Política Exterior y vicepresidente de la Comisión Europea, Josep Borrell quien defendió que “ningún referéndum falso puede justificar esto”. “La integridad territorial y la soberanía de Ucrania no son negociables”, ha añadido. Además de criticar la decisión del mandatario ruso, la Comisión Europea ha reclamado a los Veintisiete que endurezcan los controles de seguridad en la frontera para reevaluar el nivel de amenaza que pueda suponer cada ciudadano ruso que quiera entrar en territorio comunitario.
La comisaria de Interior, Ylva Johansson, dijo que “un visado a la UE no es un derecho, es un privilegio” y cree que se necesitan “controles más estrictos”.
La comisaria recordó que Moscú ha amenazado con emplear armas nucleares y que este mismo viernes el Kremlin ha anunciado la anexión ilegal de territorios ucranianos. “Esto es claramente una escalada del conflicto y supone también una escalada de la amenaza a la seguridad de la Unión Europea, necesitamos reaccionar a esto y vigilar de manera más estricta”, dijo.
A su vez, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, criticó la decisión de Putin, recordando el “atroz ataque” que se ha producido este viernes contra un convoy humanitario”.
“Nueva masacre cometida el mismo día que Putin firma la anexión ilegal de territorios ucranianos, que España y Europa nunca reconocerán” dijo Sánchez.
Finalmente Giorgia Meloni, líder del partido ultraderechiste Hermanos de Italia y ganadora de las últimas elecciones generales condenó la anexión anunciada por Putin y llamó a la “unidad” de Occidente.
Meloni aseguró que “la declaración de anexión de Rusia de cuatro regiones ucranianas tras los referéndum celebrados bajo la violenta ocupación militar no tiene valor jurídico ni político”.
La líder ultraderechista denunció que el mandatario ruso “demuestra una vez más su visión neoimperialista de tono soviético que amenaza a todo el continente europeo”.
Otra de las principales reacciones se ha producido en Reino Unido. El ministro británico de Exteriores, James Cleverly, convocó este viernes al embajador ruso en el Reino Unido, Andrei Kelin, para que dé explicaciones por la “anexión ilegal”.
Siguiendo los pasos de Estados Unidos, el Ejecutivo británico ha anunciado un paquete de sanciones prohibiendo la exportación de bienes y servicios clave para la economía rusa, con la intención de aumentar la presión sobre Putin, al “interrumpir cruciales cadenas de suministro”.