Jones deberá pagar la cifra a las víctimas del tiroteo de la escuela primaria Sandy Hook donde se produjo una masacre en el año 2012.
Por Pete Romero
Una corte del estado de Connecticut, EEUU, halló culpable por difamación al locutor estadounidense Alex Jones y lo condenó a pagar US$965 millones a las víctimas del tiroteo, en el que murieron 20 niños y 6 adultos.
Durante años, Jones aseguró que la masacre ocurrida en 2012 en la escuela primaria Sandy Hook había sido un complot del gobierno para quitarle las armas a los estadounidenses y que nadie había muerto.
La demanda fue introducida por los familiares de ocho víctimas y un agente del FBI que respondió al ataque.
Los demandantes exigían al menos 550 millones de dólares. En el juicio, alegaron que la información errónea del locutor de radio de derecha condujo a una década de hostigamiento y amenazas de muerte.
Jones, quien fundó el sitio web y programa de entrevistas Infowars y que estaba cargado de conspiraciones, ahora reconoce que el ataque fue «100% real«, una concesión que hizo en agosto en otro juicio por difamación en Texas.
El juicio en Waterbury, Connecticut, que tuvo lugar a 32 kilómetros del lugar del tiroteo, estuvo marcado por el emotivo testimonio de un grupo de padres.
Luego de los comentarios del locutor, algunas víctimas dijeron que recibieron una avalancha de odio en Internet y otros que tuvieron que mudarse de casa repetidamente por su propia seguridad.
Un padre, Mark Barden, dijo haber escuchado que la gente profanaba la tumba de su hijo Daniel «orinando sobre ella y amenazando con desenterrarla».
Pero Jones dijo que está en bancarrota, a pesar de la evidencia de que sus empresas ganaban alrededor de US$800.000 por día vendiendo suplementos dietéticos, parafernalia de armas y equipos de supervivencia.
En los argumentos finales, el abogado de los demandantes, Chris Mattei, dijo: «Cuando cada una de estas familias se ahogaba en el dolor, Alex Jones puso su pie justo encima de ellas».
El acusado, por su parte, dijo que el proceso fue un «juicio espectáculo» dirigido por un juez «tirano» y argumentó que él no tenía la culpa de las acciones de sus seguidores.
«Ya he dicho que lo siento cientos de veces, y he terminado de decir que lo siento», dijo en un dramático testimonio a fines del mes pasado que hizo llorar a algunos en la sala del tribunal.
En agosto, Jones había sido condenado por un tribunal de Texas a pagar US$4,1 millones por difamación, más otros US$45,2 millones por daños punitivos.