Un nuevo momento de tensión se produjo entre los dos países luego que Ankara acusara a Washington de ser corresponsable del atentado que dejó seis muertos el domingo en Estambul.
Por José Piñeiro
Los presidentes de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, y de EE.UU, Joe Biden, tuvieron una reunión privada este martes en la cumbre del G20 en Indonesia, en un nuevo momento de tensión entre los dos países tras acusar Ankara a Washington de ser corresponsable del atentado que dejó seis muertos el domingo en Estambul.
La agencia oficialista turca, Anadolu, fue la primera en confirmar el encuentro entre los dos líderes y explicó que iban a tratar «temas bilaterales y regionales», sin dar más detalles.
La Casa Blanca no había informado con antelación del encuentro, como suele hacer en otros casos, pero ofreció detalles de su contenido en un comunicado posterior.
Según la Casa Blanca, Biden ofreció sus condolencias por el atentado y dejó claro que Estados Unidos está del lado de Turquía, aliado de la OTAN.
Asimismo, el mandatario estadounidense agradeció a Turquía sus esfuerzos para abrir el corredor que permite exportar grano ucraniano por el Mar Negro, que expira el 19 de noviembre, plazo que se intenta posponer desde Bali.
Al respecto, tanto Erdogan como Biden coincidieron en que esa iniciativa ha sido esencial para mejorar la situación de inseguridad alimentaria que vive el mundo por la guerra en Ucrania, detalló la Casa Blanca.
La reunión se produce después de que el Gobierno turco rechazara ayer las condolencias ofrecidas por Washington por el atentado con bomba del domingo, en el que 81 personas resultaron heridas.
«No aceptamos las condolencias de la embajada estadounidense. Tenemos que cuestionar nuestra alianza con un Estado que desde su propio Senado manda dinero a Kobani y alimenta la región terrorista», dijo el ministro del Interior turco, Süleyman Soylu.
Turquía acusa del atentado a la milicias sirias de Turquía YPG y a su rama política PYD, del atentado.
Las autoridades turcas consideran que esas organizaciones y el PKK, la guerrilla kurda activa en Turquía, son ramas regionales de la misma organización terrorista.
Estados Unidos y la Unión Europea clasifican al PKK como organización terrorista, pero no al YPG, aliada de Estados Unidos en la lucha contra el Estado Islámico (Daesh) en Siria.
Aparte de por el apoyo de Washington a la milicia siria, las relaciones entre los dos países llevan tiempo deterioradas por otros temas, como las sanciones de EE.UU. a Turquía, miembro de la OTAN, por haber comprado sistemas ruso de misiles antiaéreos.
Otros temas conflictivos son el apoyo de Estados Unidos a Grecia, donde ha ampliado su presencia militar, y Chipre, a la que ha levantado el embargo de armas, así como las condiciones impuestas a Ankara para venderle aviones de combate F-16.
Durante su participación en el G20, Erdogan se ha reunido con los presidentes de Francia, Emmanuel Macron, e Indonesia, Joko Widodo, y con el príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohamed bin Salmán.