Según Lavrov, “Kyiv se niega categóricamente a cualquier negociación y presenta condiciones que son a toda vista irreales e inadecuadas dada la situación”.
Por José Piñeiro
Sergei Lavrov, ministro de Exteriores de Rusia, calificó de “irreales e inadecuadas” las propuestas presentadas durante la cumbre del G20 por Ucrania para iniciar negociaciones de paz.
Según Lavrov, quien asiste en sustitución del dictador ruso Vladimir Putin, “Kyiv se niega categóricamente a cualquier negociación y presenta condiciones que son a toda vista irreales e inadecuadas dada la situación”.
El jefe de la diplomacia rusa agregó que también transmitió esa postura al líder francés, Emmanuel Macron, con el que mantuvo un breve encuentro en el marco de la cumbre. “Mantuve hoy una breve conversación con el presidente Macron, quien reafirmó su intención de continuar los contactos con el presidente Putin para encontrar algún tipo de acuerdo que pueda resolver la situación”, dijo.
El diplomático también sostuvo en Bali otro corto encuentro con el canciller alemán, Olaf Scholz. Por otra parte, Lavrov criticó la duración del discurso de Zelensky en el G20, que se alargó durante “veinte minutos”, lamentó. “Los otros líderes tenían solo tres minutos”, indicó y calificó la intervención de Zelenski de “rusófoba y agresiva”. “Saqué una conclusión de su discurso y es que no escucha ningún consejo occidental”, aseguró. A su vez, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, dijo que la postura ucraniana sobre la reanudación de las negociaciones de paz “evidencia que Kyiv de facto y de iure no quiere dialogar”.
Por ello, agregó, “los objetivos de la Federación de Rusia serán alcanzados a través de su operación militar especial”.
En su intervención por videoconferencia en el G20, Zelenski se negó categóricamente a hacer concesiones a la parte rusa y anunció una serie de propuestas que incluyen garantizar la seguridad en materia nuclear, afianzar “el derecho a la alimentación de cada persona en el mundo”, garantizar la “seguridad energética” y otras. Zelenski pidió asimismo la liberación de todos los prisioneros de guerra, la implementación de la Carta de la ONU para restaurar la integridad territorial ucraniana, la retirada de las tropas rusas de territorio ucraniano y el cese de las hostilidades. Ese es el camino para “prevenir una escalada del conflicto” que confirme el fin de la guerra, aseveró.