Putin sostuvo todo el discurso sobre una copa de champán llena. No hay rastro del comportamiento rígido y severo habitual, se balancea con su mirada vaga por la habitación.
Por José Piñeiro
El dictador ruso Vladimir Putin confundió su propia propaganda y anunció nuevos ataques contra objetivos civiles visiblemente borracho y tambaleándose,
El 9 de diciembre en Rusia es el Día de los “Héroes de la Patria”. Ya hubo un evento correspondiente en el Kremlin el jueves. Durante la ceremonia, los soldados recibieron la medalla “Héroes de Rusia”. Y también se bebió una copa o dos de vino espumoso.
Ahora el video de un discurso del presidente Vladimir Putin se está volviendo viral. En él, primero arremetió contra la desinformación extranjera, diciendo que había mucho ruido sobre los ataques rusos a la infraestructura civil en Ucrania, que solo describe como un “país vecino”.
“Sí, lo estamos haciendo. ¿Pero quién lo empezó? ¿Quién bombardeó el puente de Crimea? ¿Quién no abastece de agua potable a Donetsk?”, son algunos de los puntos que enumera Putin. Incluso acusa a Ucrania de un “acto de genocidio”. Por lo tanto, los ataques continuarán.
Con todo esto, sin embargo, algo más está causando revuelo entre los espectadores. Putin está sosteniendo todo el discurso sobre una copa de champán llena. No hay rastro del comportamiento rígido y severo habitual, el belicista se balancea y se balancea alegremente de una pierna a la otra, su mirada vaga por la habitación, sus cejas se vuelven locas, su mano gesticula casualmente cuando no está en el bolsillo del pantalón.
Todos están de acuerdo: Putin está borracho. Nunca se había visto en esta condición antes. Tal vez por eso confunde un poco su propia propaganda: se dice que Ucrania no está suministrando agua potable a Donetsk, pero no a Crimea. Al menos esa ha sido siempre la acusación.
“En el pasado, un video así difícilmente habría salido del Kremlin. Ya se está mostrando a Putin…”, dijo un profesor de Europa del Este en la Universidad de Frankfurt en Twitter. Se despiertan recuerdos de las actuaciones de Boris Yeltsin en los años 90. “Esta es la primera vez que veo a Putin borracho en cualquier contexto”, dijo el economista sueco y experto en Putin Anders Aslund.