Mercado laboral de EEUU sólido a pesar de posible recesión

WASHINGTON (Reuters) – El número de estadounidenses que presentaron nuevas solicitudes de subsidios de desempleo aumentó menos de lo esperado la semana pasada, lo que apunta a un mercado laboral aún tenso, mientras que la economía repuntó más rápido de lo estimado previamente en el tercer trimestre.

La fortaleza del mercado laboral, que también se vio subrayada por una cierta reducción de las listas del desempleo a principios de diciembre, después de una expansión generalizada desde octubre, aumenta el riesgo de que la Reserva Federal siga subiendo los tipos de interés a un nivel más alto y los mantenga ahí durante un tiempo mientras aborda la inflación.
«La economía no está tan cerca de la muerte como pensaban los mercados», dijo Christopher Rupkey, economista jefe de FWDBONDS en Nueva York. «Es muy posible que la Fed tenga que subir aún más los tipos de interés en 2023 porque la economía no se está desacelerando, por lo que las presiones alcistas sobre los precios pueden persistir».
Las solicitudes iniciales de subsidios estatales de desempleo aumentaron en 2.000, hasta una cifra desestacionalizada de 216.000, en la semana finalizada el 17 de diciembre, dejando intacta la mayor parte de la caída de la semana anterior, según mostraron el jueves los datos del Departamento de Trabajo.
Los economistas consultados por Reuters habían previsto 222.000 solicitudes para la última semana. Las solicitudes han oscilado al alza y a la baja en las últimas semanas, pero se han mantenido por debajo del umbral de 270.000, que según los economistas sería una señal de alarma para el mercado laboral.

Una serie de despidos en el sector tecnológico y en industrias sensibles a los tipos de interés, como la vivienda, no han tenido impacto material en las solicitudes. Las solicitudes no ajustadas cayeron 4.064 hasta 247.867 la semana pasada, en medio de grandes descensos en California, Indiana, Ohio y Texas, que compensaron un gran aumento en Massachusetts.
El presidente de la Fed, Jerome Powell, dijo la semana pasada que «parece que tenemos una escasez estructural de mano de obra.» El banco central estadounidense subió la semana pasada su tipo de interés oficial en 50 puntos básicos, hasta situarlo entre el 4,25% y el 4,50%, el más alto desde finales de 2007. Los funcionarios de la Fed esperan que el tipo suba a entre el 5,00% y el 5,25% el año que viene.
Las bolsas estadounidenses abrieron a la baja. El dólar se mantuvo estable frente a una cesta de divisas. Los precios de los bonos del Tesoro estadounidense cayeron.
ACAPARAMIENTO DE TRABAJADORES
Los datos sobre solicitudes de subsidio de desempleo cubrieron el periodo durante el cual el gobierno encuestó a las empresas para el componente de nóminas no agrícolas del informe de empleo de diciembre.
Las solicitudes cayeron moderadamente entre las semanas de noviembre y diciembre, lo que sugiere otro mes de sólidas ganancias de empleo. El crecimiento del empleo ha sido de una media de 392.000 puestos de trabajo al mes este año. Los datos de la próxima semana sobre el número de desempleados ofrecerán más pistas sobre el estado de la contratación en diciembre.

Los economistas creen que es probable que las empresas recorten la contratación antes de embarcarse en despidos. En general, los empleadores se han mostrado reacios a despedir trabajadores tras las dificultades para encontrar mano de obra durante la pandemia de COVID-19.
El informe de solicitudes mostró que el número de personas que reciben prestaciones tras una semana inicial de ayuda cayó en 6.000 hasta 1,672 millones en la semana que terminó el 10 de diciembre, retrocediendo desde un máximo de 10 meses. Las llamadas solicitudes continuas, un indicador de la contratación, habían tendido al alza desde principios de octubre.
Algunos economistas habían considerado que el aumento constante de las solicitudes continuas era una señal de cautela entre las empresas, que se preparaban para una temida recesión el año que viene. Otros, en cambio, se opusieron a interpretarlo como un indicio de relajación del mercado laboral, señalando que la mayoría de los trabajadores prefieren no empezar un nuevo trabajo durante las vacaciones y que las empresas también cierran temporalmente en estas fechas.
La fortaleza del mercado laboral está ayudando a apuntalar la economía al generar sólidas ganancias salariales, que contribuyen a aumentar el gasto de los consumidores. Un segundo informe del Departamento de Comercio confirmó el jueves que la economía repuntó en el tercer trimestre tras contraerse en la primera mitad del año.

El producto interior bruto aumentó a una tasa anualizada del 3,2% el pasado trimestre, según informó el Gobierno en su tercera estimación del PIB. El ritmo revisado al alza fue del 2,9% el mes pasado. La economía se había contraído un 0,6% en el segundo trimestre.
La revisión al alza del PIB del trimestre pasado refleja mejoras en el gasto de los consumidores, la inversión empresarial y los gastos de las administraciones estatales y locales.
A pesar de los crecientes temores de recesión y del desplome del mercado inmobiliario, las estimaciones de crecimiento para el cuarto trimestre alcanzan un ritmo del 2,7%, con los consumidores haciendo el trabajo duro, apoyados también por los ahorros acumulados durante la pandemia.
El gasto empresarial en bienes de equipo también se ha mantenido firme a pesar del encarecimiento de los préstamos.
Reportaje de Lucia Mutikani; Edición de Chizu Nomiyama