La deuda es con bufetes en EEUU que llevan litigios contra acreedores que buscan cobrar deudas por impagos de bonos y nacionalizaciones.
Por Ángela Betancourt
El gobierno interino de Juan Guaidó dejó una deuda formal de 20,7 millones de dólares a bufetes de abogados estadounidenses que llevan litigios contra acreedores que buscan cobrar deudas por impagos de bonos y nacionalizaciones llevadas a cabo hace más de 15 años, según un documento revisado por Reuters.
Durante su interinato reconocido por más de 60 países y destituido a finales de este 2022, la gestión de Guaidó contrató a unos ocho bufetes de abogados para gestionar litigios con empresas y tenedores de bonos.
De acuerdo con la información del documento, entre octubre de 2020 y octubre de 2022, el parlamento opositor autorizó pagos de casi 30 millones de dólares a los abogados, pero aún no se les ha pagado 20,7 millones de dólares.
En ese sentido, el documento también sostiene un informe del equipo de fiscales del gobierno interino, en el que los abogados afirman que de no seguir adelante con las demandas se arriesgarían a perder los activos en el extranjero. Con esto se refieren a la concesión de derechos dada por algunos tribunales estadounidenses a los acreedores para negociar la venta de activos venezolanos en el extranjero con el fin de cobrar las deudas. Este es el caso de la refinería Citgo, filial de Pdvsa.
En respuesta a esta situación, los grupos de la oposición venezolana sostienen que el control de los activos en el extranjero no está en peligro, pese a la destitución del gobierno interino de Guaidó.