Un plan de Macron para reformar el sistema de pensiones busca elevar la edad mínima de jubilación hasta los 64 años.
Por José Piñeiro
Una jornada de huelgas y manifestaciones se inició este jueves en Francia contra el plan del Gobierno de Emmanuel Macron para reformar el sistema de pensiones elevando la edad mínima de jubilación hasta los 64 años.
Las protestas, coordinadas por los ocho sindicatos franceses más importantes, podrían paralizar gran parte del país, ya que trabajadores de sectores como ferrocarriles, escuelas, hospitales y controladores de tráfico aéreo participan en la huelga, de 24 horas de duración, recogen medios locales.
«Creo que se superará el millón [de manifestantes], dadas las cifras que ya tengo», dijo el secretario general del sindicato CGT, Philippe Martínez, poco antes del inicio de la marcha de París.
El ministro de Transporte, Clément Beaune, advirtió que sería «un jueves de penurias», instando a todos los que puedan a trabajar desde casa. Entretanto, las primeras cifras ofrecidas por las autoridades sugieren que al menos 40.000 personas marcharon por la ciudad de Lyon, mientras que 30.000 lo hicieron en Toulouse, 26.000 por Marsella, 15.000 por Montpellier y 14.000 por Tours.
Sin embargo, los números de sindicatos difieren. Por ejemplo, declararon que en Marsella 140.000 personas salieron a las calle. En total, las concentraciones han sido convocadas en más de 200 ciudades.
El servicio ferroviario nacional SNCF está operando un tercio de los trenes en sus líneas de alta velocidad, mientras que en el metro de París una de las líneas cerró por completo y otras doce han operado con interrupciones.
Por la mañana, se registró una caída sustancial en la producción de electricidad y se detuvieron las entregas de las refinerías operadas por TotalEnergies.
El Ministerio de Educación informó que el 42 % de los docentes de educación primaria y el 35 % de los de secundaria se juntaron a la huelga, con una participación promedio del 38,5 % entre el profesorado.
En el aeropuerto de Orly de París, el 20 % de vuelos han sido cancelados. Otros servicios públicos permanecen cerrados.
La jornada no transcurrió exenta de tensiones ni de enfrentamientos entre Policía y manifestantes. En particular, varios agentes lanzaron gases lacrimógenos contra estudiantes del instituo Helene Boucher, en el distrito 20 de la capital, cuando se disponían a instalar pancartas en contra de la reforma de pensiones frente a las puertas del establecimiento, reporta BFMTV. Según información preliminar, al menos 20 personas fueron detenidas en el marco de la movilización en la capital.