El banco suizo UBS ha alcanzado un acuerdo para adquirir Credit Suisse por un valor de 3.000 millones de francos suizos, unos 3200 millones de dólares, en una operación que fusionará a las dos mayores entidades de ese país. La venta se llevó a cabo contra reloj durante el fin de semana con el objetivo de anunciarla antes de la apertura de los mercados para intentar contener la corrida bancaria que enfrentaba el principal banco suizo.
A pesar de que UBS pagó solo 0,76 francos suizos por cada acción de Credit Suisse (las cuales cerraron a 1,86 francos el viernes), la operación fue considerada necesaria para garantizar la estabilidad del sistema financiero suizo e internacional, ya que Credit Suisse es uno de los 30 bancos sistémicos a nivel mundial y uno de los dos principales bancos de Suiza.
El acuerdo se realizó con una serie de garantías por parte del Estado suizo, incluyendo cambios en la legislación para que el acuerdo pudiera ser convalidado sin someterse a la votación de los accionistas, 9.000 millones en garantías para afrontar las futuras pérdidas que le depare la operación y una línea de liquidez de 100.000 millones de francos suizos del Banco Nacional de Suiza.
La Autoridad de Supervisión del Mercado Financiero de Suiza (FINMA) aseguró que todas las actividades comerciales de ambos bancos continuarán sin restricciones ni interrupciones. La fusión creará una entidad con unos 120.000 empleados y un volumen de activos de más de 1,6 billones de dólares.