Roberto Enríquez en Lara: Un llamado a transformar la apatía en fuerza unificadora
Roberto Enríquez, el precandidato de Copei, quiere convertirse en un faro de resistencia en medio de un tumultuoso paisaje político. Su desafío: transformar la apatía que aniquila a la primaria opositora en una fuerza unificadora que impulse un cambio en Venezuela.
Desde Lara, Enríquez dibuja una imagen lúcida de la situación. Las primarias de la oposición, enfrentadas a inhabilitaciones, demandas y una conspiración en desarrollo, luchan por mantener la cabeza fuera del agua. «Es evidente que hay una conspiración en curso a la que le debemos cerrar el paso», advierte. Pero no se rinde. Su propuesta se basa en un frente monolíticamente unido y una postura firme para frustrar estos esfuerzos.
Pero la trama se complica aún más. La controversia interna y las renuncias de figuras claves, como la vicepresidenta María Carolina Uzcátegui y el suplente Rafael Arraiz Lucca, han sido golpes bajos que han golpeado el proceso de la primaria. Un drama político digno de una serie de televisión, pero con consecuencias muy reales para los venezolanos desesperados por un cambio.
Enríquez, sin embargo, se muestra inquebrantable en su optimismo. Reconoce los obstáculos, pero también señala que ya están tomando medidas para superarlos. El relevo de los renunciantes por parte de la comisión de primarias y la continuación de la organización del evento central de la unidad son señales alentadoras para él. «Ha sido una buena noticia saber que la comisión de primaria ha remplazado a los renunciantes y continúa organizando el evento central de la unidad para unir a la oposición. Su mensaje fue contundente.»