El defensa regresa al equipo que lo vio nacer, y las emociones están a flor de piel.
Después de una pausa que parecía eterna, Sergio Ramos ha vuelto al lugar donde todo comenzó. Casi dos décadas después de dejar el Sevilla para unirse al Real Madrid, el icónico defensa ha decidido regresar a su hogar original.
“Se cumple un sueño”, expresó un emocionado Ramos en su presentación. No es una sorpresa escucharle decir que se siente como si estuviera «volviendo a casa». Y no, no estamos hablando de una serie de Netflix, sino de la vida real de uno de los futbolistas más destacados de España.
Con nostalgia y sinceridad, Ramos admitió que el regreso significa mucho para él a nivel “emocional y sentimental”. Además, reconoció y pidió disculpas por algunos errores y gestos del pasado hacia el sevillismo, demostrando una madurez digna de un líder.
A su lado, importantes figuras como el presidente sevillista, José Castro, y el director deportivo, Víctor Orta, le acompañaban. Pero el corazón se le salía del pecho cuando tenía a su familia cerca, con Pilar Rubio, su esposa, y sus cuatro hijos testigos del momento tan especial.
“Hoy es un día inolvidable, emocionante”, compartió, subrayando que quería «enmarcar» este regreso. Ramos no solo vuelve al lugar que lo vio crecer como profesional, sino que busca fortalecer ese vínculo que desde su infancia ha mantenido con el club y la afición.
Sin duda, Sevilla y su gente le han dado la bienvenida con los brazos abiertos. Ahora, todos esperan verlo defender esos colores con la misma pasión y entrega que lo caracterizan. Solo el tiempo dirá si este regreso está destinado a ser tan legendario como su carrera. ¡Bienvenido a casa, Sergio!