Crimea

Crece la tensión en el Mar Negro: Ucrania lanza fuertes ataques en Crimea

Operaciones militares intensivas buscan desmilitarizar la península; Ucrania recupera plataformas clave y merma las capacidades de defensa rusa.

En una escalada significativa de hostilidades, Ucrania llevó a cabo una serie de ofensivas potentes en Crimea, afectando severamente a las instalaciones militares y navales de Rusia en la región del Mar Negro.

En un arco de tiempo no especificado, se registraron al menos tres ataques destacados. Uno de estos implicó el uso de drones y misiles Neptun, los cuales tenían como objetivo una instalación militar rusa cerca de la localidad de Eupatoria en Crimea occidental. Imágenes satelitales corroboran la destrucción de un sistema de defensa antiaérea S-300/400 Triumph, con un valor estimado de 1.200 millones de dólares.

Rusia, por su parte, reportó una cuarta acción por parte de Ucrania, empleando un dron marítimo para atacar el «aerodeslizador de la Flota del Mar Negro ‘Samum’”. Sin embargo, aseguran que la embarcación rusa logró neutralizar el dron ucraniano sin sufrir daños significativos.

El epicentro de estas operaciones bélicas parece ser la estrategia de Kiev de desmilitarizar la península de Crimea, un territorio que ha estado bajo control ruso desde 2014. Al eliminar la amenaza que supone la flota rusa en el Mar Negro, Ucrania podría tener una oportunidad real de recuperar el control de la península y poner fin al bloqueo ruso de sus puertos, vital para sus operaciones de exportación e importación.

Recuperación de plataformas estratégicas

Un desarrollo crucial pero menos publicitado ha sido la recuperación de cuatro plataformas offshore de gas y petróleo en el Mar Negro por fuerzas especiales ucranianas. Estas plataformas, que habían estado bajo control ruso desde la anexión de Crimea, podrían ser vitales para los esfuerzos de Ucrania.

El comandante del Grupo de Fuerzas Especiales del Ministerio de Defensa de Ucrania, conocido solo por su nombre de guerra ‘Pein’, reveló detalles de la operación en una entrevista televisiva, indicando que la misión había estado en preparación durante aproximadamente un mes y medio. ‘Pein’ compartió que utilizaron un bote inflable por su maniobrabilidad y baja visibilidad para los aviones enemigos.

Un botín valioso en medio del conflicto

El control de estas plataformas no solo representó un golpe estratégico, sino que también proporcionó a Ucrania un sistema radar Neva que Rusia empleaba para labores de reconocimiento en la región. El software del sistema, indicó ‘Pein’, contiene información invaluable que podría responder a muchas preguntas de inteligencia ucraniana, potencialmente brindando a Ucrania una ventaja significativa en el conflicto en curso.

En medio de estos acontecimientos vertiginosos, Ucrania parece estar ganando terreno, empujando a las fuerzas rusas hacia las costas de Crimea, donde, con un mayor margen de maniobra, puede atacar con creciente facilidad. Esta serie de ofensivas marca un capítulo significativo y potencialmente transformador en el conflicto prolongado entre Ucrania y Rusia, y el mundo está observando ansiosamente cómo se despliega la situación.