Israel se prepara para la posibilidad de un conflicto de dos frentes mientras Líbano se convierte en un nuevo centro de tensiones.
La creciente tensión entre Israel y Líbano amenaza con expandir el conflicto actual que Israel mantiene con Hamás en la Franja de Gaza. Richard Hecht, portavoz internacional del Ejército israelí, advirtió a Líbano sobre las consecuencias de respaldar a Hamás, marcando diez días de continuos intercambios de fuego e incidentes violentos en la frontera entre ambos países.
El lanzamiento de un misil antitanque desde territorio libanés hacia la localidad fronteriza israelí de Metula ha exacerbado las tensiones, provocando una rápida respuesta de las tropas israelíes. Aunque el foco principal de Israel sigue siendo el conflicto con Hamás en Gaza, las defensas se han reforzado en el frente norte, preparándose para la posibilidad de una guerra de dos frentes.
Los intentos de infiltración desde Líbano y los ataques a infraestructura militar de Hizbulá han marcado un periodo de creciente hostilidad, el más intenso desde 2006. La respuesta israelí a los disparos y la infiltración ha dejado un saldo de al menos 21 muertos, incluyendo militares y civiles, en ambos lados de la frontera.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha emitido una advertencia clara a Irán y Hizbulá, sugiriendo una respuesta contundente si la frontera norte se convierte en un nuevo frente de conflicto. La evacuación de comunidades cercanas a la frontera refleja la seriedad con la que Israel está tomando la escalada de tensiones con Líbano.