COSTA

António Costa abandona su mandato entre acusaciones y lágrimas

El Primer Ministro portugués se desvincula de su cargo tras la sombra de la corrupción que ha caído sobre su gobierno.

António Costa, Primer Ministro de Portugal, ha puesto fin este martes a su liderazgo político con un discurso conmovedor, anunciando su renuncia en medio de una profunda crisis que ha tocado las puertas de su administración.

«En estas circunstancias, obviamente, he presentado mi renuncia al presidente de la república», declaró Costa en una intervención que sorprendió y emocionó, marcando un antes y un después en la política lusitana.

El escándalo de corrupción que precipitó esta decisión ha dejado a Portugal en estado de shock, tras la detención de Vítor Escária, mano derecha del hasta ahora Primer Ministro, y el allanamiento de varias propiedades en una operación anticorrupción que ha remecido los cimientos del gobierno socialista.

Costa, con su reputación en juego y la dignidad a flor de piel, aseguró frente a las cámaras: «Confío totalmente en el sistema de justicia», aseverando su inocencia y la transparencia de su gestión.

No obstante, la sombra de la duda se cierne sobre su figura, con la fiscalía investigando su posible implicación en los actos ilícitos que han puesto a su equipo bajo la lupa.

La política portuguesa se enfrenta ahora a una encrucijada, con un futuro incierto y la urgencia de restaurar la confianza en sus instituciones. La renuncia de Costa abre un nuevo capítulo en la historia del país, uno que estará marcado por la búsqueda de la verdad y la justicia en un panorama que, hasta hace poco, parecía estable.