Vitel’homme Innocent es acusado de secuestrar y asesinar ciudadanos estadounidenses en Haití, con una recompensa de $2 millones por información.
Vitel’homme Innocent, un nombre que quizá no resuene como el de Osama bin Laden o Ted Bundy, pero que ahora se asocia con una de las amenazas más significativas para ciudadanos estadounidenses en Haití, ha sido incluido en la lista de los «10 fugitivos más buscados» del FBI.
La entidad anuncia una recompensa de $2 millones por información que conduzca a su captura, en un esfuerzo conjunto para neutralizar al líder de una pandilla haitiana acusado de secuestros y asesinatos.
Durante una conferencia de prensa en Miramar, funcionarios del FBI detallaron los cargos contra Innocent, quien a sus 37 años se ha convertido en el fugitivo número 532 en la lista del FBI desde 1950. La acusación más reciente vincula a Innocent con el secuestro y posterior asesinato de ciudadanos haitianoamericanos el año pasado en Haití, así como su papel en el secuestro de misioneros cristianos estadounidenses en 2021.
El FBI, en su esfuerzo por localizar a Innocent, ha desplegado una estrategia de investigación que incluye vallas publicitarias en el sur de la Florida. Sin embargo, la captura del líder pandillero en Haití se ve obstaculizada por la ausencia de un presidente activo, la violencia y la anarquía rampante en el país. El FBI planea colaborar con socios internacionales para enfrentar estos desafíos logísticos.
Innocent enfrenta una posible pena de muerte o cadena perpetua por los delitos de confabulación, secuestro y homicidio. El FBI insta a cualquier persona con información sobre Innocent a venir adelante, destacando que su pandilla, Kraze Barye, es responsable de múltiples secuestros de alto perfil y actos de violencia en Haití.
La situación en Haití es crítica, con un aumento sin precedentes de delitos graves, incluyendo homicidios y secuestros, como lo reportó la Policía Nacional de Haití. La comunidad internacional, incluido el Consejo de Seguridad de la ONU, ha expresado su preocupación por el deterioro de la seguridad y la estabilidad en la nación.
El caso de Vitel’homme Innocent se convierte en un llamado urgente a la acción, no solo para las autoridades, sino también para la comunidad global, para poner fin a los crímenes que afectan tanto a ciudadanos de Haití como a aquellos vinculados a la diáspora en Estados Unidos.