Ecoanalítica presenta un informe sobre la economía venezolana en 2023, revelando una contracción económica y una inflación en dólares más baja que el año anterior.
Asdrúbal Oliveros, director de la consultora Ecoanalítica, presentó un detallado balance de la economía venezolana para el cierre de 2023, confirmando una caída en la actividad económica del 0,7% en comparación con el año anterior.
Este resultado, aunque esperado por las tendencias observadas a lo largo del año, marcó una desviación de las proyecciones iniciales de Ecoanalítica, que en octubre esperaba un modesto crecimiento del 1,7%.
El año económico de Venezuela estuvo caracterizado por una fuerte contracción en los dos primeros trimestres, seguida de una estabilización en el tercer trimestre y una mejora insuficiente en el último trimestre para revertir la tendencia negativa. La contracción económica estuvo fuertemente influenciada por un rendimiento insatisfactorio en el sector comercial, un pilar clave para la recuperación económica de los años 2021 y 2022, pero que en 2023 experimentó una contracción del consumo privado del 4%.
Este declive en el consumo fue un reflejo de una disminución significativa en el poder adquisitivo, exacerbada por el estancamiento de los salarios, especialmente en la administración pública. El gobierno de Nicolás Maduro, que no ha aprobado aumentos salariales significativos en 21 meses, se ha centrado en ajustes de bonos, mientras que la inflación continúa su avance tanto en bolívares como en dólares, haciendo que la vida en Venezuela sea cada vez más costosa.
A pesar de este panorama sombrío, no todos los indicadores económicos fueron negativos. La inflación, aunque sigue siendo la más alta del mundo, mostró signos de desaceleración. Según Ecoanalítica, la tasa de inflación en 2022 cerró alrededor del 172,6%, mientras que los datos del Banco Central de Venezuela indicaron un 234% el año anterior, lo que sugiere una tendencia a la baja en 2023.
Este freno en la inflación se atribuye en parte a la política de intervención cambiaria del BCV, que busca estabilizar el tipo de cambio inyectando divisas en el mercado. Dado que la mayoría de los precios en Venezuela están vinculados al dólar, esta estabilidad ayuda a contener los aumentos de precios en bolívares.
Sin embargo, la inflación en dólares también es una realidad en Venezuela. A pesar de que los precios aumentan incluso cuando están marcados en dólares, el año 2023 cerró con una inflación en dólares del 11,1%, una mejora notable en comparación con el aproximado 25% de 2022.