Acusaciones de la Vicepresidenta venezolana sobre violaciones al Acuerdo de Ginebra y favorecimiento a ExxonMobil.
La vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, ha encendido nuevamente el debate sobre el conflicto territorial del Esequibo, apuntando hacia presuntas irregularidades en los negocios entre el gobierno de Guyana y la transnacional petrolera ExxonMobil. En una reciente publicación en X, anteriormente conocida como Twitter, Rodríguez resaltó alegaciones hechas por el abogado Christopher Ram en Stabroek News, un periódico de Guyana.
Según Rodríguez, Ram denunció en una de sus columnas que el Fondo de Recursos Naturales (NRF) de Guyana, establecido para el pago de impuestos, contiene alrededor de 276 mil millones de dólares que deberían haber sido transferidos a la Autoridad de Ingresos de Guyana. «Guyana continúa violando el derecho internacional y el Acuerdo de Ginebra para favorecer a la Exxon Mobil y otras transnacionales. Venezuela no desmayará en su defensa», escribió Rodríguez en su publicación.
Esta denuncia se inserta en un contexto más amplio, relacionado con el antiguo conflicto territorial entre Venezuela y Guyana por la región del Esequibo. El gobierno de Nicolás Maduro ha criticado duramente a ExxonMobil, acusándola de intentar explotar ilegítimamente los recursos naturales de la zona en disputa. Según el Ejecutivo venezolano, las acciones de la empresa petrolera representan un intento de expoliación de un territorio que Venezuela reclama desde hace más de un siglo.
La relación entre ExxonMobil y Guyana ha sido un tema sensible para Venezuela, especialmente en lo que respecta a la explotación de recursos petroleros en la región del Esequibo. El gobierno de Maduro sostiene que las actividades de ExxonMobil en esa área violan el derecho internacional y el Acuerdo de Ginebra, el cual establece las pautas para resolver la disputa territorial entre Venezuela y Guyana.
Este nuevo capítulo en la larga historia del conflicto por el Esequibo subraya la complejidad y persistencia de esta disputa territorial. Las acusaciones de Rodríguez sobre las presuntas irregularidades financieras añaden otra dimensión a este ya tenso escenario, poniendo en evidencia la interacción entre la política internacional, los intereses corporativos y los recursos naturales en la región.