En su último mensaje a los sacerdotes, el Papa Francisco enfatiza la importancia de brevedad y relevancia en las homilías.
El Papa Francisco, en su perenne esfuerzo por mejorar la comunicación dentro de la Iglesia Católica, ha recomendado a los sacerdotes que limiten sus homilías a un máximo de 8 minutos.
Esta sugerencia fue dada durante una sesión cerrada con sacerdotes romanos, en la que enfatizó la importancia de que los sermones sean concisos y directos al corazón, cubriendo temas relevantes en la vida diaria y evitando temas excesivamente sofisticados.
Según uno de los asistentes, el Papa resaltó que las homilías deben ser más efectivas al comunicar con los fieles, enfocándose en ser breves y pertinentes.
Esta declaración se suma a una serie de pronunciamientos similares del pontífice, quien ha sido un defensor constante de una mayor claridad y concisión en la predicación.
La recomendación del Papa Francisco busca fortalecer el vínculo entre los sacerdotes y sus comunidades, asegurando que los mensajes impartidos durante las misas sean accesibles, relevantes y espiritualmente enriquecedores para los fieles.