Gobierno de Brasil no emite declaraciones sobre la inhabilitación de la líder opositora venezolana.
El silencio del presidente brasileño Lula da Silva y su gobierno ante la inhabilitación de la líder política venezolana María Corina Machado ha generado interrogantes y críticas en el panorama internacional.
Esta postura contrasta marcadamente con las reacciones de otros países y organizaciones internacionales, quienes han expresado su preocupación y condena ante lo que se percibe como un obstáculo para la realización de “elecciones libres, justas y transparentes” en Venezuela.
Lula callado. Petro callado (a pesar de haber sufrido la misma injusticia que María Corina). Hagamos de ingenuos y creamos que es por sus oficios para que el madurismo no se salga del carril de la negociación.
— Francisco Poleo (@FranciscoPoleoR) January 29, 2024
Mientras la Organización de Estados Americanos (OEA) y países como Argentina, Uruguay, Paraguay, Ecuador, Estados Unidos y el Reino Unido han reaccionado frente a esta situación, calificándola de perjudicial para la democracia venezolana y un paso atrás, el gobierno de Lula da Silva ha optado por mantenerse en silencio.
Este enfoque ha llamado la atención, dado que el líder del Partido de los Trabajadores (PT) ha venido trabajando en recomponer las relaciones con el gobierno de Nicolás Maduro, a quien recibió en Brasilia el pasado 29 de mayo.
En aquel encuentro, Lula afirmó que existen “prejuicios” contra Venezuela, a pesar de los informes de violaciones a los derechos humanos, como torturas y detenciones de opositores políticos. «Ustedes tienen como medios deconstruir esa narrativa”, dijo Lula, refiriéndose a la percepción internacional sobre Venezuela.
Esta falta de pronunciamiento sobre la inhabilitación de Machado ha provocado críticas y cuestionamientos sobre la verdadera postura de Lula da Silva en cuanto a la situación política en Venezuela. A mediados del año pasado, al ser consultado sobre la situación de Machado, Lula dijo desconocer los detalles de la medida contra la dirigente opositora venezolana, lo que ha incrementado la percepción de una postura evasiva frente a los temas críticos relacionados con el gobierno de Maduro.