MARIA ELVIRA

María Elvira Salazar en el punto de mira: Acusaciones de inconsistencia en sus votos

Lucia Báez-Geller, retadora demócrata, critica a Salazar por su historial de votaciones y busca capitalizar en una reciente entrevista conflictiva.

La congresista María Elvira Salazar está enfrentando críticas de su oponente demócrata, Lucia Báez-Geller, quien la atacó en un video titulado “Salazar Lied”.

Esta acusación surge días después de que Salazar tuviera dificultades para recordar cómo votó en ciertas leyes durante una entrevista con CBS News Miami.

Báez-Geller, miembro de la junta escolar en Miami-Dade County, criticó a Salazar por oponerse a una financiación federal estimada en $24 millones para su distrito.

Durante la entrevista con Jim DeFede, Salazar no pudo recordar sus votos en proyectos de ley específicos y tuvo que consultar a su personal. Báez-Geller se ha centrado en esta aparente contradicción, señalando que Salazar se ha atribuido el mérito de medidas de gasto que en realidad había opuesto.

La financiación en cuestión proviene de varias leyes federales, incluida la ley de infraestructura bipartidista y la ley CHIPS y Ciencia para expandir la fabricación y la investigación de semiconductores en EE. UU. Báez-Geller enumeró varios proyectos financiados en el distrito, como la expansión de una instalación de salud mental y mejoras en un centro de salud comunitario y en un departamento de policía.

La campaña de Salazar ha restado importancia a las acusaciones, calificándolas de táctica de «liberales radicales fuera de contacto».

Este enfrentamiento se produce en un contexto de alta competitividad en el distrito de Salazar en Miami-Dade County, donde los votantes registrados demócratas superan a los republicanos.

Con más de $800.000 disponibles para su campaña de reelección, Salazar afronta un desafío significativo ante las acusaciones de Báez-Geller y la creciente atención del Comité de Campaña Congresional Demócrata.

Este episodio resalta las tensiones en la carrera hacia las elecciones de noviembre, donde el control de la Cámara de Representantes de EE.UU. está en juego. Mientras los demócratas buscan recuperar terreno en áreas clave como Miami-Dade, la campaña de Salazar enfrenta el desafío de reconciliar su historial de votaciones con las necesidades y expectativas de sus electores en un distrito altamente hispano y políticamente cambiante.