Cientos de miles de brasileños disfrutan del último día oficial del Carnaval con comparsas callejeras y altas temperaturas en las principales ciudades del país.
El último día del Carnaval en Brasil estuvo marcado por la celebración masiva en las principales ciudades del país, con comparsas multitudinarias y altas temperaturas. Desde Río de Janeiro hasta Brasilia, los brasileños disfrutaron del colorido y la música característicos de esta festividad.
En Río de Janeiro, la meca del Carnaval brasileño, la cantante Ludmilla encabezó un gigantesco ‘bloco’ con hasta 600.000 personas esperando para disfrutar de su espectáculo. Sin embargo, las altas temperaturas obligaron a finalizar la presentación antes de lo programado, preocupándose por la integridad de los asistentes.
En Sao Paulo, se roció agua entre la multitud desde camiones cisternas para combatir el calor extremo. A pesar de las altas temperaturas, alrededor de medio centenar de comparsas desfilaron por las calles de la ciudad, celebrando la diversidad cultural con música y baile.
En Brasilia, a pesar de la preocupación por el brote de dengue, la comparsa Calango Careta animó a la capital brasileña en un ambiente familiar. Mientras tanto, el Distrito Federal enfrenta una situación de emergencia por salud pública debido al brote de la enfermedad, con un hospital de campaña instalado para aliviar la presión en la red hospitalaria.
Aunque el Carnaval oficialmente terminó el martes, muchos brasileños planean extender las festividades al menos hasta el fin de semana. Además, este miércoles de ceniza será crucial, ya que se elegirá a la escuela de samba campeona del Carnaval de Río de Janeiro. La celebración continuará en las próximas semanas, con comparsas previstas en las principales ciudades del país durante el poscarnaval.
La fiesta del Carnaval de Brasil persiste, reuniendo a miles de personas que se resisten a poner fin a esta tradición tan arraigada en la cultura brasileña.
(Texto con información de EFE – Fotos de AFP y AP)
