En un esfuerzo conjunto entre la Embajada de Francia y la Alcaldía de Baruta, el Parque Vizcaya se engalana con un homenaje a la icónica obra de Antoine de Saint-Exupéry.
El pasado 17 de febrero, el Parque Vizcaya, en El Cafetal (Caracas), se convirtió en el escenario de un emotivo acto cultural: la inauguración de una escultura de El Principito junto a su amigo el Zorro. Esta iniciativa, fruto de la colaboración entre la Embajada de Francia en Venezuela y la Alcaldía de Baruta, busca enriquecer el patrimonio artístico y cultural del municipio, ofreciendo un nuevo espacio de encuentro y reflexión para la comunidad.
El evento contó con la participación del alcalde de Baruta, Darwin González, y el embajador de Francia en Venezuela, S.E Emmanuel Pineda, quienes, acompañados por vecinos y entusiastas del arte y la literatura, realizaron el conteo regresivo para la revelación de la obra. «La presencia de esta escultura será fuente de inspiración y reflexión para todos los visitantes, especialmente para los más pequeños, invitándolos a conocer sobre su historia y literatura», destacó la Alcaldía en un comunicado.
La pieza se suma a otras esculturas de personajes animados ya presentes en Baruta, como Mafalda, Manolito y Snoopy, convirtiendo las calles del municipio en un vibrante museo al aire libre que celebra la imaginación y los valores universales. La iniciativa cuenta con el respaldo de Olivier d’Agay, nieto de Saint-Exupéry y presidente de la Fundación Antoine de Saint-Exupéry, asegurando la autenticidad y el respeto por el legado del autor.
Además, el alcalde González anunció una campaña para que los ciudadanos puedan donar libros de El Principito a los niños de las comunidades del municipio, promoviendo así la lectura y el acceso a la cultura desde edades tempranas.
«El Principito», publicado en 1943, no solo es uno de los libros más leídos y traducidos en el mundo sino también un símbolo de la búsqueda de la belleza y la verdad en nuestras vidas. La escultura en el Parque Vizcaya no solo honra la memoria de este relato eterno sino que también invita a los habitantes y visitantes de Baruta a explorar el rico mundo de la literatura y el arte, contribuyendo a un legado cultural que trasciende generaciones.
Esta apuesta por llenar las calles de Baruta de cultura y arte, según palabras del alcalde González, no solo marca un antes y un después en la sociedad sino que también refuerza la identidad comunitaria a través del reconocimiento de obras literarias que han tocado el corazón de millones de personas alrededor del mundo.