En una reunión de urgencia, el presidente busca consenso para financiar el gobierno y apoyar a aliados internacionales ante la parálisis en la Cámara de Representantes.
En un momento crítico para la política interna y externa estadounidense, el presidente Joe Biden ha convocado a una reunión crucial con los líderes republicanos y demócratas del Congreso en un intento por desentrampar los acuerdos presupuestarios y evitar un cierre parcial del gobierno programado para el viernes. La falta de fondos para agencias estratégicas como el Departamento de Defensa y de Estado ha puesto en jaque la continuidad de las operaciones gubernamentales.
Durante la reunión, Biden imploró a los líderes del Congreso actuar con premura para evitar el cierre y aprobar un paquete de ayuda crucial para Ucrania e Israel. Este llamado se produce en un contexto de estancamiento en la Cámara de Representantes, donde la división controlada por los republicanos no muestra señales de ceder.
La discusión, que tuvo lugar en la Oficina Oval con la presencia de figuras claves como el director de la CIA, Bill Burns, subrayó la importancia de coordinar la respuesta estadounidense a la invasión rusa de Ucrania y los esfuerzos por lograr la liberación de rehenes retenidos por Hamás tras su ataque a Israel.
Sin embargo, las tensiones entre demócratas y republicanos quedaron evidenciadas en las declaraciones posteriores a la reunión. Mientras los demócratas se centraron en la urgencia de financiar el gobierno y apoyar a Ucrania e Israel, el republicano Mike Johnson destacó la seguridad fronteriza como una prioridad nacional, reflejando las profundas divisiones políticas que complican la aprobación del presupuesto.
La situación es especialmente precaria dado el acuerdo previo entre el presidente republicano de la Cámara, Mike Johnson, y el líder de la mayoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, sobre un nivel de gasto discrecional que aún no ha sido implementado debido a las luchas internas republicanas.
«Una prioridad o deber básico del Congreso es mantener abierto el gobierno», declaró la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, subrayando la importancia de la reunión para evitar un cierre que afectaría directamente a la población y la imagen internacional del país.
Con el reloj en contra, Biden y los líderes del Congreso buscan encontrar un terreno común para avanzar en la financiación gubernamental y el apoyo a Ucrania e Israel. La resolución de este impasse no solo es vital para la estabilidad interna de Estados Unidos sino también para su posición y compromisos en el escenario internacional.