El mandatario venezolano reitera que cualquier decisión de la Corte Internacional de Justicia será irrelevante para Caracas, enfatizando el diálogo directo bajo el Acuerdo de Ginebra.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha subrayado la firme posición de su gobierno respecto a la prolongada disputa territorial con Guyana sobre la región del Esequibo.
Durante una entrevista en el canal estatal VTV, Maduro enfatizó que, independientemente de cualquier sentencia que emita la Corte Internacional de Justicia (CIJ), Venezuela no reconoce la jurisdicción de este tribunal y continuará abogando por un diálogo directo con Guyana.
«Saque lo que saque la Corte, cuando lo saque, perdieron su tiempo, porque Venezuela estará en el mismo lugar, con la misma posición y tendrán que sentarse con nosotros a dialogar, a negociar y a llegar un acuerdo», expresó el mandatario venezolano, reafirmando que el único marco válido para resolver este conflicto es el Acuerdo de Ginebra de 1966. Este acuerdo, firmado por ambas partes, estipula que cualquier solución debe ser consensuada a través de conversaciones directas y amistosas.
Maduro criticó las acciones del gobierno guyanés, describiéndolas como «amenazas» y «provocaciones», pero aseguró que las puertas de Caracas permanecen abiertas al diálogo. «Yo dije claramente que, más temprano que tarde, Guyana deberá sujetarse al único documento válido para solventar la disputa por el Esequibo (…) podrán decir misa, pero solo hay un ‘Acuerdo de Ginebra’, que excluye cualquier decisión judicial», sostuvo.
Este conflicto territorial, que se extiende por casi 160.000 kilómetros cuadrados, ha sido una fuente de tensión entre Venezuela y Guyana por décadas. Maduro, en su intervención en la VIII Cumbre de la Celac celebrada en San Vicente y las Granadinas, calificó la disputa como «una herencia del colonialismo», pero destacó la capacidad de diálogo de ambos países para superar este legado.
La crisis alcanzó un punto crítico cuando Venezuela celebró un referendo unilateral para anexionarse el Esequibo y desplegó una división militar cerca de la zona en disputa, lo que ha exacerbado las tensiones con Guyana, que defiende el Laudo Arbitral de París de 1899 como base de su soberanía sobre el área.