Vente denuncia paradero desconocido de Hernández, Brand y Alviarez

ALVIAREZ

Detenciones y acusaciones de planes violentos oscurecen el panorama electoral venezolano, mientras la oposición clama por transparencia y justicia.

Vente Venezuela (VV) ha levantado la voz para denunciar la incertidumbre sobre el paradero de tres de sus siete miembros detenidos en los últimos dos meses bajo acusaciones del Ministerio Público de supuestos vínculos con planes violentos contra el Gobierno. La desaparición de Emill Brandt Ulloa, Henry Alviarez y Dignora Hernández pone en evidencia la severa represión empleada en el contexto de una atmósfera política ya de por sí cargada.

Brandt, detenido a principios de marzo, habría sido el detonante para las detenciones de Alviarez y Hernández el pasado 20 de marzo, según afirmaciones de la Fiscalía que los vincula a planes “violentos” y “terroristas”.

Sin embargo, el partido exige claridad sobre su situación actual y su ubicación, una demanda que resuena no solo entre sus filas sino también en la comunidad internacional preocupada por las prácticas de detención arbitraria.

El Comité de Derechos Humanos de VV no solo ha exigido la liberación inmediata de estos miembros, sino también de Joe Villamizar, Luis Camacaro, Juan Freites y Guillermo López, detenidos desde el pasado 23 de enero.

«A pesar de la represión, la persecución y las constantes violaciones de derechos humanos a las que hemos sido sometidos, seguimos decididos a continuar en esta lucha electoral», afirmó el comité, reafirmando su compromiso con la lucha por unas elecciones presidenciales libres y justas el próximo 28 de julio.

Las acciones del fiscal general Tarek W. Saab, quien recientemente anunció órdenes de aprehensión contra otras siete personas vinculadas a María Corina Machado, han exacerbado las tensiones, llevando a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) a condenar estas detenciones. La CIDH ha hecho un llamado urgente a la comunidad internacional para presionar al Gobierno de Maduro para garantizar la celebración de elecciones competitivas y justas, libres de coacción y represión.

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