HAMBRE

Israel liberaría entre 700 y 800 palestinos a cambio de 40 rehenes

Con mediación internacional, se vislumbran progresos en las conversaciones para un posible alto al fuego, pero las diferencias persisten.

Este fin de semana en Doha, bajo la atenta mirada de mediadores de Catar, Egipto y EE. UU., se han registrado avances significativos en las tensas y prolongadas negociaciones entre Israel y el grupo islamista Hamás.

La presencia de los jefes de las agencias de inteligencia israelíes, el Mosad y el Shin Bet, no solo simboliza la importancia de estas conversaciones sino que también refleja una mayor disposición a negociar por parte de Israel en comparación con rondas anteriores.

Según filtraciones a medios israelíes y confirmaciones a Reuters, las negociaciones ahora se centran en un intercambio de prisioneros en el que Israel liberaría entre 700 y 800 palestinos a cambio de 40 rehenes, una propuesta que dobla las cifras discutidas previamente y que muestra un notable acercamiento entre las partes.

Sin embargo, el acuerdo enfrenta obstáculos significativos, particularmente en lo que respecta al perfil de los prisioneros a liberar, con Hamás exigiendo la liberación de prisioneros de alta seguridad por cada mujer soldado, una condición que Israel ha buscado moderar.

Además, el acuerdo contempla una tregua de seis semanas y permite el regreso de algunos gazatíes desplazados, aunque Israel se mantiene firme en su negativa a un alto al fuego general o a retirarse completamente de Gaza. Esta postura refleja la complejidad de las demandas en juego y la dificultad de alcanzar un consenso que satisfaga a ambas partes.

El escenario es aún más complicado por la necesidad de obtener la aprobación de Yahya Sinwar, líder de Hamás en Gaza y estratega detrás de los ataques del 7 de octubre, quien permanece escondido y es difícil de contactar. Este factor añade una capa adicional de incertidumbre al ya tenso proceso de negociación.