El exvicepresidente colombiano acusa a Petro de ignorar a representantes clave de la oposición venezolana en su visita a Caracas.
La reciente visita del presidente colombiano Gustavo Petro a Caracas ha levantado polvo en el ámbito político, no solo por su encuentro con Nicolás Maduro, sino también por las críticas sobre las reuniones que sostuvo, o no sostuvo, con la oposición venezolana. Francisco «Pancho» Santos, exvicepresidente y exembajador colombiano, lanzó una dura crítica hacia Petro, acusándolo de engañar sobre la naturaleza de sus interacciones con la oposición venezolana.
A través de un mensaje en X, Santos expresó su descontento con la visita de Petro, especialmente por la exclusión de figuras como María Corina Machado, quien es una de las voces más destacadas de la oposición venezolana. «Presidente, deje de engañar a la gente. Se reunió con Manuel Rosales, quien NO representa a la oposición venezolana», señaló Santos, quien también ofreció, con ironía, facilitar el contacto de Petro con Machado, insinuando que la omisión no pudo haber sido un simple descuido.
La crítica de Santos no se limitó a la ausencia de Machado en las reuniones. También apuntó a la falta de encuentros con los miembros de la mesa de negociación y con la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), que aglomera a los partidos y organizaciones reconocidos por ser oposición en Venezuela. Este hecho, según Santos, demuestra una falta de compromiso real con el diálogo inclusivo y la democracia en el país vecino.
Esta controversia surge en un momento en que las relaciones entre Colombia y Venezuela están bajo la lupa, especialmente después de la reciente reanudación de los vínculos diplomáticos y comerciales entre ambos países. Las acusaciones de Santos resaltan el delicado balance que debe manejar Petro entre el acercamiento a Maduro y el apoyo a los principios democráticos y a la oposición venezolana, que lucha por un cambio político en su país.
El debate sobre la legitimidad de los interlocutores en Venezuela es un tema recurrente en el ámbito internacional, y las acciones de Petro, según Santos, no ayudan a clarificar la posición de Colombia frente a esta cuestión. La visita de Petro a Caracas, lejos de ser un gesto diplomático rutinario, se convierte así en un foco de críticas y en un reflejo de las tensiones políticas que aún persisten en la región.