CENTRALES

Ucrania inicia la construcción de nuevos reactores nucleares con tecnología estadounidense

En respuesta a los desafíos energéticos y los ataques rusos, Ucrania avanza en su independencia energética con la ayuda de Westinghouse.

En una era de incertidumbre y desafíos constantes, Ucrania da un paso audaz hacia la consolidación de su independencia energética. Este lunes, Energoatom, la compañía estatal de energía atómica ucraniana, anunció el inicio de la construcción de dos nuevos reactores nucleares en colaboración con la empresa estadounidense Westinghouse. Estos reactores, que se ubicarán en la central nuclear de Jmelnitski en el oeste de Ucrania, representan un cambio significativo en la política energética del país, alejándose de la tecnología nuclear rusa previamente dominante.

Con estos dos nuevos reactores, la central de Jmelnitski pasará a tener un total de seis unidades, y hay planes para construir otros siete reactores como parte de una estrategia más amplia para reforzar el sistema eléctrico nacional de Ucrania. «Esta es nuestra respuesta a los terroristas (rusos); nunca nos dejarán sin electricidad, y las nuevas tecnologías nos permitirán resistir», afirmó Herman Galushchenko, ministro de Energía ucraniano.

Este proyecto llega en un momento crítico, ya que Rusia ha intensificado su campaña de bombardeos contra infraestructuras de generación eléctrica en Ucrania, destruyendo más del 80% de la capacidad de generación térmica de electricidad del país, según fuentes del gobierno ucraniano. Sin embargo, hasta ahora, Rusia ha evitado atacar instalaciones nucleares, lo cual podría ser visto como una escalada dramática y provocar una respuesta internacional considerable.

La elección de la tecnología AP 1000 de Westinghouse no solo simboliza una alianza estratégica entre Ucrania y Estados Unidos sino que también posiciona a Ucrania en la vanguardia de la seguridad y eficiencia nuclear. Los reactores de la tecnología AP 1000 están diseñados para ser más seguros y eficientes que sus predecesores, ofreciendo esperanzas de una fuente de energía estable y sostenible para el país.

La importancia de la energía nuclear en Ucrania no puede subestimarse, ya que actualmente más del 50% de su electricidad proviene de esta fuente. Además, con la construcción de estos nuevos reactores, la central de Jmelnitski no solo compensará la pérdida de capacidad causada por la ocupación rusa de la central de Zaporiyia, la más grande de Europa, sino que la superará, reafirmando la soberanía energética de Ucrania.

Este desarrollo es un testimonio del ingenio y la resiliencia de Ucrania en tiempos de adversidad. Con estos pasos, Ucrania no solo busca garantizar su futuro energético sino también enviar un mensaje claro sobre su capacidad y determinación para defender su independencia y prosperar a pesar de los desafíos externos.