La población de Rafah se desplaza masivamente en respuesta a la orden de evacuación del ejército israelí, elevando las preocupaciones internacionales.
La ciudad de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, enfrenta una situación de emergencia humanitaria crítica, con más de 100.000 personas desplazándose en los últimos días ante la inminente amenaza de una ofensiva terrestre por parte del ejército israelí. Según informes de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el éxodo de la población comenzó tras una orden de evacuación emitida el lunes para la zona este de Rafah.
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) han registrado un alarmante aumento en el número de desplazados, que ya supera las 110.000 personas. «Unas 30.000 personas huyen de la ciudad cada día», señaló Georgios Petropoulos, director de OCHA para Gaza, destacando además que «la mayoría de estas personas tuvieron ya que desplazarse cinco o seis veces» desde que el conflicto entre Israel y el grupo palestino Hamás, que gobierna Gaza, comenzó en octubre.
La comunidad internacional ha expresado su preocupación por los posibles impactos de una operación militar en una zona densamente poblada como es Rafah, donde antes del conflicto residían aproximadamente 1,4 millones de personas, en su mayoría desplazados internos. La situación actual ha sido descrita por Petropoulos como una «emergencia sin precedentes».