Dirigentes adecos en Mérida abandonan a Bernabé y a «El Burro»: Apoyan a Edmundo
Dirigentes merideños del ala judicializada de AD respaldan a González Urrutia para las presidenciales, denunciando división con la candidatura de Luis Eduardo Martínez.
Dirigentes del partido Acción Democrática (AD) en el estado Mérida, específicamente del sector controlado por Bernabé Gutiérrez e intervenido judicialmente por el régimen, han declarado su apoyo a la candidatura presidencial de Edmundo González Urrutia. Esta decisión ha venido acompañada de críticas hacia la candidatura de Luis Eduardo Martínez, a quien acusan de fomentar la división dentro de las fuerzas opositoras.
El exgobernador de Mérida y dirigente de AD en resistencia, Williams Dávila, hizo pública una carta del buró de asuntos sindicales de AD judicializada, donde se enfatiza que «la única forma de derrotar al gobierno de Nicolás Maduro el próximo 28 de julio es con el respaldo a González Urrutia». La carta también resalta el despertar del fervor ciudadano gracias al apoyo de la líder opositora María Corina Machado a la candidatura de González Urrutia, y la esperanza que esto ha generado tanto en Mérida como en todo el país.
Según la misiva, consultas internas con la militancia de AD han revelado un claro deseo de unidad y sentido común, identificando a González Urrutia como la mejor opción para lograr una victoria en las próximas elecciones presidenciales.
En contraste, la candidatura de Luis Eduardo Martínez ha sido fuertemente cuestionada por estos mismos dirigentes. Martínez, quien cuenta con el respaldo de AD judicializada y otras tarjetas como Derecha Democrática Popular, Copei y Bandera Roja, también en su versión judicializada, es visto por muchos dentro de AD como un elemento que fractura y divide. La carta expresa que «consideramos que el candidato Luis Eduardo Martínez lejos de ser una alternativa constituye un factor de división y fractura al logro del rescate de nuestra democracia». Además, sugiere que su candidatura podría ser favorable a los intereses del gobierno actual, lo cual ha generado desconfianza y falta de credibilidad entre la militancia.