En un giro político, el Partido de los Socialistas de Cataluña se alza con la victoria en las elecciones regionales, superando a los partidos independentistas tras una década de dominio.
El Partido de los Socialistas de Cataluña (PSC) ha emergido como el claro vencedor en las elecciones catalanas celebradas este domingo, obteniendo 42 escaños y capturando cerca del 28% de los votos, lo que representa aproximadamente 900.000 votos. Esta victoria pone fin a una década de dominio independentista en el Parlamento regional y sugiere un cambio significativo en el ánimo político de Cataluña.
Más de 5.7 millones de ciudadanos estaban habilitados para votar en estas elecciones cruciales que decidirían el rumbo del liderazgo en la Generalitat. Al final del conteo, el PSC no solo logró un notable aumento en escaños sino que también desplazó a partidos tradicionalmente fuertes como Junts+ y ERC. Junts+ se mantuvo como la segunda fuerza con 36 escaños, mientras que ERC sufrió una reducción considerable, perdiendo 13 escaños en comparación con las elecciones anteriores.
El Partido Popular (PP) también vio un incremento significativo, sumando 12 nuevos escaños, lo que podría reconfigurar las alianzas y el equilibrio de poder dentro del Parlamento catalán. Los resultados sugieren la posibilidad de formar un tripartito de izquierdas entre el PSC, ERC y los Comuns, lo cual podría garantizar una mayoría absoluta y un gobierno estable.
Sin embargo, la jornada electoral no estuvo exenta de controversias, ya que un incidente con el robo de un cable en Barcelona provocó la cancelación de varios servicios de tren, afectando la movilidad en toda la región y complicando la logística del proceso electoral. A pesar de las dificultades y las peticiones de algunos partidos para extender el horario de votación, la jornada concluyó sin modificaciones significativas.
La participación electoral fue ligeramente superior a la de las elecciones de 2021, con un 45,80% a las 18:00 horas del domingo, destacando el compromiso cívico de los catalanes en un momento político tan crucial.