Elvis Amoroso se hace el duro y rechaza levantamiento de su sanción ante la UE

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El presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), Elvis Amoroso, ofrece información a los medios de comunicación hoy, en Caracas (Venezuela). EFE/ Rayner Peña R.

Elvis Amoroso se hace el duro y rechaza levantamiento de su sanción ante la UE

El presidente del CNE califica las sanciones como «genocidas» y exige el levantamiento total de las medidas impuestas por la UE, EE.UU. y Reino Unido.

En una transmisión en vivo por Venezolana de Televisión (VTV), Elvis Amoroso, presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), rechazó categóricamente el levantamiento temporal de las sanciones impuestas por la Unión Europea (UE).

Amoroso exhortó a la UE, Estados Unidos y el Reino Unido a levantar todas las sanciones, calificándolas como «genocidas» y denunciando la persecución de empresarios interesados en invertir en Venezuela.

«En mi condición de presidente del Consejo Nacional Electoral, rechazo categóricamente las pretensiones de la Unión Europea de coaccionarme, al igual que al Poder Electoral, de aparentar ante la opinión pública internacional que están procediendo al levantamiento de las sanciones coercitivas unilaterales impuestas a la República Bolivariana de Venezuela», declaró Amoroso en el comunicado emitido por el CNE.

Amoroso afirmó que las sanciones han causado un «irreparable» daño a la población venezolana, incluso, han provocado la muerte de «miles de ellos» debido al impedimento del ingreso de medicamentos, alimentos y equipos médicos esenciales. Tildó de «inmoral» el anuncio de la UE sobre el levantamiento de las medidas en su contra, insistiendo en que dichas sanciones han sido perjudiciales para la nación.

El presidente del CNE señaló que la medida es una «dádiva» que no acepta por ser contraria a sus valores ciudadanos. «Esa decisión de la UE de levantarme las sanciones solo a mí, es contraria al deber que como venezolano tengo de honrar y defender la patria, símbolos y valores, de resguardar y proteger la soberanía, la nacionalidad, integridad territorial y los intereses de la nación», subrayó.

Amoroso puntualizó que aceptar la «dádiva» de la UE sería un acto indigno y desleal hacia los millones de venezolanos afectados por las sanciones. Aseveró que la Unión Europea persiste en aplicar un «intervencionismo» en el país, con maniobras torpes que buscan eludir el creciente rechazo internacional a las medidas extorsivas que lesionan los derechos humanos y la soberanía de las naciones, incluyendo a Venezuela.

Demandó el cese incondicional de todos los mecanismos de «chantajes» que interfieren en el desarrollo del proceso electoral en Venezuela. Amoroso ratificó que, mientras los organismos internacionales persistan en las políticas de «hostilidad», será «imposible» establecer un «diálogo sincero, respetuoso y productivo» con el Poder Electoral venezolano.

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