El comunicado oficial denuncia el «robo» de Citgo por parte de EE.UU. y figuras de la oposición, y advierte sobre acciones legales contra los involucrados.
El Gobierno de Nicolás Maduro emitió este lunes un comunicado para reiterar su rechazo al «robo» de Citgo Petroleum Corporation (Citgo), filial de la empresa estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa). En un comunicado publicado en X por la vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez, el Gobierno afirmó que Citgo ha sido «instrumentalizada» por Estados Unidos, así como miembros de la “oposición neofascista”, entre ellos Leopoldo López, Juan Guaidó y Julio Borges.
«Venezuela no reconocerá ningún tipo de transacción fraudulenta. El pueblo de Venezuela, en una gran unión nacional, defenderá su patrimonio; y aplicará justicia implacable a quienes tramaron este despojo contra la República», expresó.
Según el comunicado, «la venta forzosa de Citgo constituye un nuevo episodio de la agresión multiforme que sufre Venezuela por parte de Estados Unidos con el objetivo de expoliar al pueblo venezolano de los activos que le pertenecen».
Además, el Gobierno denunció que tanto Venezuela como Pdvsa «fueron excluidos de la venta judicial de Citgo», y se les «impidió defender sus derechos ante los tribunales estadounidenses». El comunicado también señala la «complicidad de figuras como Juan Guaidó, Leopoldo López y Julio Borges”, a quienes acusa de pretender “usurpar las instituciones del país».
Asimismo, reitera que no «reconocerá la venta forzosa de Citgo», y tomará todas las medidas necesarias para «evitar el despojo definitivo de esta empresa estratégica».
Finalmente, advirtió que se reservarán las acciones legales contra cualquier empresa o individuo que participe en la compra de Citgo, «así como contra los responsables del despojo de este activo de gran importancia para el presente y el futuro de los venezolanos”. El comunicado se publica en un momento de incertidumbre por el control sobre Citgo y mientras se acercan los comicios presidenciales en Venezuela.
Desde su compra en 1990, Citgo se convirtió en uno de los activos más valiosos para el país. En octubre de 2019, la empresa Crystalex obtuvo la autorización judicial para embargar a Citgo por una deuda pendiente desde 2007, pero la intervención del Departamento del Tesoro de EE. UU. impidió que los acreedores llevaran a cabo el embargo.
Según congresistas estadounidenses, la venta impulsada por acreedores de Venezuela, podría tener graves consecuencias para la estabilidad económica y las aspiraciones democráticas del país. Los congresistas advierten en una carta pública compartida por Pdvsa ad hoc, que la venta de Citgo “socavaría los esfuerzos por restaurar la democracia en Venezuela y debilitaría las perspectivas de recuperación económica”.
Además, la venta se llevaría a cabo justo antes de las elecciones presidenciales de Venezuela en julio de 2024. “Esto podría empoderar al régimen de Maduro para reprimir aún más a la oposición democrática y dificultar la transición del país a la democracia”, expresa el documento.
La segunda ronda de licitaciones para la adquisición de Citgo finalizó la semana pasada después de que un tribunal federal estadounidense abriera el proceso. Sin embargo, se ha anunciado que el tribunal permitirá a los postores aumentar sus ofertas incluso después de la fecha límite.