La selección ucraniana no pudo avanzar a octavos debido a los resultados en otros partidos y un empate sin goles contra Bélgica.
Ucrania pagó con su eliminación el empate simultáneo en los partidos de Eslovaquia y Rumanía en Fráncfort. Los resultados del grupo dejaron sin oportunidad a la selección de Rebrov, que necesitaba un gol contra Bélgica para mantenerse en la competición. Al final, Bélgica, a pesar de estar bajo presión, logró un empate que les permite enfrentarse a Francia en octavos de final.
Sin la presencia de Tsygankov y Mudryk, el técnico Rebrov optó por una defensa sólida de cinco jugadores, intentando contener a las estrellas belgas De Bruyne y Lukaku. Sin embargo, los esfuerzos defensivos no evitaron las múltiples oportunidades creadas por el mediocampista del Manchester City y el delantero de la Roma. Ucrania solo pudo generar algunos intentos lejanos sin éxito, mientras que las noticias del empate entre Eslovaquia y Rumanía aumentaban la presión.
En la segunda mitad, Bélgica introdujo a Carrasco, quien añadió dinamismo al ataque, pero el portero Trubin logró mantener su arco en cero con varias paradas clave. Ucrania intentó hasta el último momento, con oportunidades de Manilovsky y Sudakov que pusieron en aprietos a la defensa belga, pero no lograron concretar.
Por otro lado, el empate entre Eslovaquia y Rumanía en Fráncfort, que había generado sospechas de un posible acuerdo previo, fue un partido intenso y lleno de oportunidades. Ambas selecciones se tomaron el encuentro en serio, disparando al arco en múltiples ocasiones. Duda abrió el marcador para Eslovaquia, pero Rumanía empató con un penalti de Razvan Marin tras una revisión del VAR.
A medida que avanzaba la segunda mitad, ambos equipos bajaron el ritmo, aceptando el empate que les garantizaba un lugar en los octavos de final. Rumanía se clasificó como primera de grupo, mientras que Eslovaquia avanzó como una de las mejores terceras.
Este resultado dejó a Ucrania fuera del torneo, una eliminación que resultó dolorosa dado su esfuerzo en el campo y las expectativas puestas en ellos. Con el empate de Bélgica, los diablos rojos ahora se preparan para un difícil encuentro contra Francia en la siguiente ronda.