El presidente Biden reafirma el compromiso de la OTAN con la defensa de Ucrania y advierte sobre las amenazas de Rusia y otros estados autoritarios.
El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, inauguró este martes la cumbre del 75 aniversario de la OTAN con un enérgico discurso en el que advirtió sobre la amenaza que representan Rusia y otros estados autoritarios, mientras reafirmaba el compromiso de la alianza con la defensa de Ucrania. La cumbre, celebrada en el emblemático auditorio donde se firmó el tratado original de la OTAN en 1949, coincidió con un momento crítico tanto para la alianza como para Biden.
Biden, con una voz firme y pocas equivocaciones, enfatizó la fuerza y la creciente importancia de la OTAN en un mundo que enfrenta nuevos desafíos de superpotencias. Destacó el compromiso «férreo» de la OTAN con Ucrania en su lucha contra la invasión rusa y anunció el envío de más armas para ayudar a los ucranianos a defenderse de los ataques aéreos.
«La guerra terminará con Ucrania como un país libre e independiente», aseguró Biden, acompañado de una promesa de «defender cada centímetro» del territorio de la OTAN en tierra, espacio y ciberespacio. Advirtió que el presidente ruso, Vladimir Putin, «no se detendrá en Ucrania» si logra salir victorioso.
El evento, que marca el punto medio de los tres días de celebración, llega en un momento de gran desafío para Biden, cuyo desempeño en un reciente debate electoral ha puesto en peligro su candidatura a la reelección. A pesar de este traspié, Biden mostró confianza en su capacidad para mantener unida a la alianza, afirmando que es crucial en la lucha contra las amenazas globales.
El discurso de Biden fue bien recibido por los líderes presentes, incluidos el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky y el primer ministro húngaro Viktor Orban, quien recientemente enfureció a sus aliados al reunirse con Putin. Sin mencionar sus problemas políticos, Biden se enfocó en la necesidad de una fuerte cooperación internacional.
El presidente también aprovechó la ocasión para anunciar nuevas defensas aéreas para Ucrania, incluyendo «cientos de interceptores adicionales» para proteger ciudades de ataques con misiles. Sin embargo, evitó mencionar los recientes avances territoriales de Rusia y los desafíos que enfrenta Ucrania en su lucha por retomar el control de sus ciudades.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, reforzó el mensaje de Biden, declarando que «el momento para defender la libertad y la democracia es ahora; el lugar es Ucrania». Biden entregó a Stoltenberg la Medalla Presidencial de la Libertad, el más alto honor civil en Estados Unidos.
Aunque 23 de los 32 estados miembros de la OTAN ahora gastan al menos el 2% de su producto nacional bruto en defensa, se reconoce en privado que esto no es suficiente para satisfacer la creciente demanda de nuevas armas y tecnología militar revelada por la guerra en Ucrania.
Jake Sullivan, asesor de seguridad nacional de Biden, señaló la necesidad de inversiones estratégicas en defensa, mientras que la primera ministra de Dinamarca, Mette Frederiksen, instó a los aliados a «escalar» sus esfuerzos, admitiendo que han sido «demasiado ingenuos» sobre las amenazas de Rusia y China.
(Con información de The New York Times)